BM Peluquería > Entrevistas > Vanesa Herreros - I.C.O.N.

Directora de la famosa Academia I.C.O.N. de la ciudad de Vigo, Vanesa Herreros, curtida profesional de la peluquería, es hoy y desde 2021 su responsable.

Experimentada conocedora no solo de los entresijos del cabello, sino del método de educación I.C.O.N., Vanesa ejerce la dirección de la misma, en un momento clave. La icónica marca planea la inminente ampliación de esta Academia por la que han pasado y continúan haciéndolo miles de profesionales que buscan su perfeccionamiento y excelencia.

Con una filosofía única y una educación enfocada en el éxito, la Academia I.C.O.N. es un hervidero de profesionales que buscan la mejor de las formaciones a la par que un método de trabajo y atención al cliente que les distinga y aporte un valor añadido que es el que ,en definitiva, necesitan y fideliza a sus clientes.

Hoy en Vigo la luz juguetona acaricia este paisaje emblemático de cimas, olivos y mares llenos. Es un día especialmente cálido y luminoso, con el balcón del Cantábrico de fondo, ideal para conocer de primera mano cómo trabajan los salones de la marca. De hecho, y antes de nuestra visita a la Academia, atravesamos el umbral del emblemático salón Jorge Rubín Gran Vía. Allí, Luisa Míguez y todo su equipo transforman nuestro cabello en materia sublime de manos de una de sus aclamadas experiencias, memorable, sin duda. Un servicio que nos habla de salud, lujo y belleza y que nos desconecta del mundanal ruido para transfundirnos en comunión con nuestro yo interno, a la postre el mejor que hayamos disfrutado desde hace tiempo. Y todo en un escenario que no es otro que un templo, el salón Jorge Rubín Gran Vía de la ciudad de Vigo, cuidadosamente diseñado y dedicado al milímetro en cuerpo y alma al bienestar de quien lo elige y visita.

I.C.O.N. ha logrado posicionarse como una marca premium que nos solo invierte e investiga en sus productos y formulaciones, sino que hace de las personas, los profesionales peluqueros y peluqueras su bien más preciado y querido. Y de la empresa y la atención al cliente, y los servicios, experiencias supremas, el objetivo. Un ejemplo, sin ir más lejos, es la propia Vanesa Herreros, directora de la Academia, propietaria de su propio salón en Castellón y estilista de la marca desde hace más de una década.

Vanesa se halla inmersa en la impartición de un completo y moderno 'Máster de Experto Colorista'. Y lo hace en una Academia, moderna y funcional, a la última, que en vista de la demanda se ha quedado pequeña. De ahí su próxima ampliación, prometiendo convertirse en referente y 'hub', modelo y destino para los estilistas de la marca, que encuentran en este foro del conocimiento todo lo que buscan: arte, empresa y ciencia.

Tres cualidades que definen igualmente a Vanesa, una mujer de convicciones, sólida e inquebrantable, a la que precede su trayectoria como empresaria y que une a su faceta de técnica y artista de la peluquería la de educadora, con cualidades innatas para la enseñanza y un dominio de la escena que le consolida como formadora de primera (tal y como hoy hemos podido comprobar, en Vigo).

Pero para saber más, y darlo a conocer todo a nuestros lectores de I.C.O.N. y su Academia, qué mejor que charlar de tú a tú con Vanesa Herreros, la primera entrevista de otras muchas con las que descubriremos al resto del equipo.

BEAUTY MARKET: Vanesa, comencemos por el principio. Descríbenos cómo fue tu descubrimiento de I.C.O.N. y cómo la estrecha relación que has mantenido con la marca.
VANESA HERREROS: Mi relación con I.C.O.N. se remonta a hace tiempo. He formado parte del equipo artístico de la firma y asistido a sus cursos de formación. He considerado siempre a la formación un pilar básico de la profesión. I.C.O.N. es un seguro para el negocio. De hecho, así ha ocurrido en mi caso, cuando decido convertir a I.C.O.N. en la marca de cabecera de mi salón, en Castellón. Eso fue en 2011, y desde entonces mi apuesta ha sido la de perfeccionarme y no dejar nunca de aprender.

B:M.: ¿Qué es lo que más destacarías, qué crees que es más interesante y qué lo mejor que te ha aportado tu paso por la Academia I.C.O.N.?
V.H.: (No lo duda y responde al instante.) Lo que destacaría sin duda es que I.C.O.N. me ha enseñado a cómo gestionar mi salón y cómo llegar a ser una profesional de la peluquería.

B.M.: ¿Y en lo referido a lo artístico y la técnica, qué has aprendido con las formaciones de I.C.O.N.?
V.H.: La apuesta formativa de I.C.O.N. es amplia, perfectamente programada y precisa en cuanto a los contenidos. Por eso y en lo referido a las técnicas, se trata no solo de conocer cómo aplicar correctamente un color sino también, y esto es clave y muy necesario, a conocer profundamente los diferentes estados del cabello. El resto viene después de mano de los servicios, productos y tratamientos de la marca que convierten el paso del cliente por la peluquería en un momento memorable, una experiencia de relajación y belleza única, difícilmente imitable. I.C.O.N. va más allá de lo básico y que todo el mundo conoce. I.C.O.N. es otro nivel.

B.M.: Aparte de dirigir e impartir tú misma distintos cursos, ¿cuál es el resto de equipo de formación en esta la que será próximamente nueva Academia I.C.O.N. tras su inminente ampliación?
V.H.: He de decir que se trata de un equipo muy unido, cohesionado y generador de sinergias. Cada semana hacemos cursos de mañana y tarde los lunes y martes a los que acuden profesionales venidos de toda España y también internacionales. Las personas que conforman el equipo de educación de la marca, son todas a su vez propietarias de salones I.C.O.N. Así, existe una parte que está fija, formando dentro del equipo, con presencia el mes completo, lunes y marte en los cursos y otra que acude dos veces mensualmente a las convocatorias de la Academia ejerciendo como instructores. Estos últimos, además, habitualmente forman también en sus propios salones cuando regresan a los mismos. Algo consustancial a la firma. Se trata, podríamos decir, de un concepto de educación #NonStop. Mi trabajo consiste así no solo en formar sino también en preparar y desarrollar las materias, crear los calendarios, asignar formadores... Y sobre todo y por encima de cualquier otro objetivo, que los alumnos disfruten de una experiencia única e inolvidable tal como ocurre en los salones I.C.O.N. con la atención y servicios, las experiencias que se ofrecen al cliente.

B.M.: Un equipo entonces, y a su vez, muy entrenado.
V.H.: Sí, son las personas que me acompañan cada semana y son las personas que están ahí, entrenando de manera personalizada a los distintos grupos de alumnos. Un concepto, el de la personalización en la enseñanza, sobre el que quiero incidir. Son estos educadores los que se dedican a estar pendientes de cada grupo para cubrir cada necesidad o carencia en cuanto a conocimientos de cada alumno. Un equipo, el de los formadores I.C.O.N., que está entrenado además también de manera profunda e individual. Asistimos a entrenamientos con Chiara, cofundadora de la marca junto a Jorge Rubín. Ella crea los conceptos, tendencias y técnicas y nos entrena aquí en Vigo y en Los Ángeles, Estados Unidos, para sacar todo lo que llevamos dentro y lo mejor de nosotros mismos como profesionales y entrenadores.

B.M.: ¿Dónde te encuentras más cómoda Vanesa, formando o ejerciendo tu profesión en el salón?
V:H.: Sinceramente, a mí la formación me llena muchísimo, pero mi salón también lo necesito (explica mientras sonríe. Vanessa es una mujer con las ideas claras y así lo transmite cuando responde y así se expresa cuando educa). Aunque no sabría decirte a qué nivel me gusta más o menos cada faceta, pero también he de comentar que si no formo, no solo lo echo de menos, sino que lo necesito.

B.M.: ¿Y cómo te perfeccionas tú misma para poder dar lo máximo en excelencia a la hora de transmitir conocimientos?
V.H.: Me exijo mucho y no paro de estudiar y perfeccionarme con Chiara. Desde que trabajo con ella mi mente está en otro punto, o sea, ella me hace ver las cosas ¡tan fácilmente!, lo cual se transmite también a la Academia. Chiara es todo para mí, abrió mi mente, me aporta seguridad, conocimiento, creatividad y saca lo mejor de mí, es mi fuente de inspiración. Lo mismo que ocurre con Jorge Rubín, mis dos pilares y también los de la marca, nunca mejor dicho... Soy una persona muy perfeccionista, muy exigente. Quiero dar lo mejor a los otros, pero para eso me he de preparar yo. Y en eso consiste también mi trabajo.

B.M.: ¿Cuál es tu relación con Jorge Rubín como directora de la Academia?
V.H.: He de decir que como comunicador, Rubín es una persona increíble (a las pruebas nos remitimos, Jorge Rubín ha logrado colocar a I.C.O.N. como una de las mejores marcas, marca premium entre las preferidas de los salones y consumidores). Rubín me evalúa cada semana, enseñándome, guiándome, diciéndome cómo tengo que hablar, formar, comunicar... Además, implementa mejoras constantes, para llevar la academia a otro nivel. Chiara, amplía todo mi conocimiento y me lleva a otro nivel creativo y profesional. Sin duda, dos grandes, no lo digo yo, lo dice y comprueba cualquiera de los alumnos y peluqueros y peluqueras que apuestan por la marca, que es en sí también una filosofía de atención y empresa, además de producto.

B.M.: Hoy, te hemos descubierto impartiendo un curso de mechas. ¿Pero dónde se encuentra más cómoda Vanesa profesional peluquera, en el corte, el color, el diagnóstico...?
V.H.: ¡Ay! (ríe feliz la directora de la Academia I.C.O.N.). Pues ahí me has pillado, no sabría decirte, porque para mí todo es importante. Quizá he de incidir, porque considero que es la clave de un buen servicio, cuando yo tengo la primera conversación, el primer contacto con el cliente. Ahí, sí, es donde me siento muy cómoda porque siento a la vez que puedo lograrlo. Es decir, me refiero al poder de convicción que proyectas y consigues con un cliente. Explicarle quiénes somos, cómo trabajamos, cuál es el trabajo que vamos a realizar... Y después, por supuesto, el color, que es mi pasión. Que se ha de acompañar de un buen corte, por cierto... ¡Todo es importante! Por eso, elegir en este caso es difícil, se trata de controlar todo el servicio, desde la recepción al protocolo a seguir con el cliente, el servicio, etc. De ahí que debamos de tener e conocimiento necesario para ello. Y vuelvo a la educación: sin formación, no existe el éxito. Como digo yo misma al describir mi salón, el equipo ha de estar preparado no solo para cumplir las expectativas, sino para superarlas. He invertido y hemos de invertir en formación, tal como propone y hace I.C.O.N., la de nuestro personal y la nuestra propia, ya que para poder ofrecer un servicio de calidad, un salón bonito no es suficiente.

B.M.: Estás impartiendo un máster de experto colorista, pero el temario de formación de la Academia abarca mucho más.
V.H.: Diagnóstico, protocolo, productos, servicio... Se trata de una formación 360º. Técnica, empresa y atención al cliente.

B.M.: ¿Y qué están aprendiendo hoy tus alumnos en esta propuesta, la de la formación como 'Experto Colorista'?
V.H.: Nuestro enfoque es el enseñarles o el darles las herramientas para que puedan comprobar ellos mismos cuál es la diferencia entre aplicar simplemente un color y cómo sería convertirse en un maestro de la coloración. Les enseñamos cómo llegar a ese nivel. No se trata solo de elegir un producto o número, sino de un trabajo global y muy profesional, en el que testar el tipo de cabello, diagnosticar, tratar..., para a continuación, proceder a la coloración. Teniendo en cuenta la moda, las tendencias, las distintas técnicas de aplicación para crear efectos infalibles y sorprendentes y mejorar siempre la imagen y belleza de nuestro cliente y su cabello. Algo en lo que hacer hincapié, porque cada cabello es de una manera, cada estructura es de una manera, en función de lo cual se utilizan unas cosas u otras. Ser un experto colorista entonces no es solo saber aplicar bien un color, sino saber cómo lo aplico, dónde lo aplico y en qué estado o tipo de cabello. A partir de ahí viene el resto, el styling, por supuesto, y cómo dirigirte al cliente, el poder de convicción. Cuando tú tienes un conocimiento e incluso cuando hablamos de una técnica, darle el valor necesario y explicarle al cliente que es algo exclusivo confeccionado para él en sintonía con las tendencias, por lo que posee un gran valor, un valor mayor. En la Academia y formaciones I.C.O.N. no dejamos nada al azar, el servicio en el salón de peluquería es un servicio, insisto, global.

B.M: ¿Con cuántos alumnos cuenta la Academia en la actualidad?
V.H.: Cada semana tenemos 30 o 32 alumnos en horario continuado, mañana y tarde, con un descanso para comer. Empleamos en las formaciones 60 modelos, una mitad en la primera parte de la jornada y la otra durante la segunda. En otras ocasiones utilizamos cabezas de primerísima calidad y una alta estética, traídas de Estados Unidos. Le prestamos gran atención a los detalles, se trata de una formación de calidad.

B.M.: Hablamos entonces de una Academia de Formación Avanzada.
V.H.: Sí, y además también porque el profesional que acude a nuestra Academia en Vigo de cualquier parte de nuestro país y también internacional, además, ya posee un nivel. Todos son peluqueros I.C.O.N que quieren perfeccionarse. La marca dispone de 'coach' que entrenan y asesoran a los peluqueros y peluqueras de la marca. Ellos seleccionan y proponen primero la formación local para después, una vez superada esta formación básica, acudir a la Academia. Todos nuestros alumnos poseen un nivel mínimo de conocimientos que, más tarde, con nosotros, aumentan y perfeccionan. No obstante, disponemos también de programas de distintos niveles, según necesidades e incluso cursos de apertura de salones donde el profesional se sumerge en el mundo I.C.O.N. Somos una academia 'viva', como puedes ver. Donde siempre se está cocinando la receta 'Master Chef' ganadora, para darle al profesional no solo lo que le va a perfeccionar sino lo que realmente necesita según su experiencia y propia formación.

B.M.: ¿Qué distingue en concreto a una Academia Avanzada del resto y a la Academia I.C.O.N, frente a las demás en particular?
V.H.: Sí, somos una Academia Avanzada. Jamás se encontrará el alumno con un material obsoleto, porque nosotros estamos muy atentos a los nuevos tiempos, las nuevas técnicas, las nuevas tendencias y los nuevos consumidores. Somos una academia superactualizada. De ahí, por ejemplo, la inversión en 60 modelos reales, 30 de mañana y 30 de tarde en los cursos como éste que estamos impartiendo ahora de 'Experto Colorista'. No nos limitamos a exponer una técnica, sino que hablamos de las diferencias del tipo de cabello, hablamos de por qué se crea esa técnica, hablamos de qué decoloración y en qué casos. Hablamos y les demostramos a nuestros alumnos sobre cabellos reales, porque son los que encontramos en los salones, cabellos que vienen ya procesados o con mechas. Siempre vamos un paso más allá. No nos conformamos, como decía, con enseñar solo una técnica, sino lo que hay detrás de una técnica y la importancia que tiene utilizar un buen producto.

B.M.: ¿Qué es lo más gratificante para ti a la hora de trabajar como formadora?
V.H.: Cuando los alumnos vienen y te dicen: "¡Quiero repetir! Lo que he aprendido contigo me ha servido para esto". Sí (dice alegre y con gran satisfacción, las de las cosas bien hechas, Vanesa), esto es lo mejor... Y es que, además, normalmente pasa. Es decir, en la Academia I.C.O.N., no solo enseñamos, sino que motivamos a nuestros alumnos continuamente. Los evalúo porque eso es importante, es decir, que hagan un trabajo, saber en qué punto están y dónde tienen que mejorar. Por eso quieren volver, porque comprueban por ellos mismos su transformación y resultados y eso es lo que me hace a mí cada semana también estar más fuerte, prepararme al máximo y darlo todo, lo mejor de mí misma.

B.M.: Vanesa, ¿la peluquería es moda?
V.H.: ¡Por supuesto! De hecho, y aparte de nuestros cursos técnicos, también disponemos de cursos de moda, que relacionan a ésta con la peluquería y viceversa, resaltando y profundizando en cómo saber tratar al cliente y darle aquello que no solo le favorezca, sino que también esté en consonancia con la moda. Es decir, en I.C.O.N. no solo transmitimos o enseñamos a nuestros alumnos a hacer una técnica, sino fórmulas de tendencia. La peluquería, hoy, se se inspira en las calles y las pasarelas de Los Ángeles, New York... Bebe de Instagram, Tik Tok... De todo lo que se cuece en redes sociales, por ejemplo. Exacto. Hay que aprender a identificar que un color o que una técnica no es para todo el mundo, sino que se ha de personalizar la técnica e incluso la fórmula.

B.M.: Si existe algo que diferencia a I.C.O.N. y sus peluquerías es el experimentar un servicio, una experiencia extraordinaria en cuanto a cuidado y tratamiento del cabello. ¿Cómo lográis inculcar esta filosofía, este tipo de servicio, esta ciencia, esta dedicación exclusiva del peluquero I.C.O.N, para con su cliente y en su salón?
V.H.: Esto es así porque los peluqueros y peluqueras I.C.O.N. están totalmente dedicadas a la ciencia, son profesionales que conocen y entienden todos y cada uno de los ingredientes de cada formulación y producto y además, quiero reiterar e incidiré siempre, se saben expresar, comunicar, contárselo y recomendárselo al cliente.

B.M.: Es decir, se trata de profesionales entregados al arte por supuesto, pero también a la ciencia y a la empresa. ¿Cómo se consigue eso?
V.H.: Yendo más allá. Enseñamos a gestionar el negocio, a comunicarse con un cliente, a identificar el cabello. I.C.O.N. no crea productos para distintos tipos de cabello, sino para las necesidades que ese cabello tiene. Porque los cabellos finos también necesitan ingredientes que aplicamos en un cabello grueso, como puede ser una hidratación, por ejemplo. También necesitan antioxidantes, como el cabello grueso. Por eso, enseñamos a diferenciar y contamos con los mejores productos y servicios para ello, que efectivamente se convierten en auténticas experiencias de salud, belleza y bienestar.

B.M.: ¿Qué significa para Vanesa ser una peluquera I.C.O.N.?
V.H.: Es una forma de vida, una forma de vida ilusionante (le brillan los ojos). Que va más allá de lo que es un trabajo. Es la pasión por lo que haces. La manera en la que te enseñan y se preocupan por ti. Quieres vivirlo todo y vivirlo así, y así lo haces, y continúas y no te cansas, siempre te acompaña la ilusión y el afán de superación.

B.M.: ¿Ser peluquero I.C.O.N. es sinónimo de éxito en el negocio?
V.H.: ¡Totalmente! Yo, antes, percibía la peluquería de otra manera. Ahora, para mí, la peluquería es un trabajo creativo y gratificante, que aporta valor añadido y te enriquece, a ti y tu cliente, como negocio y como persona, como artista y como empresa. Veo dónde estoy ahora y lo que tengo, las personas que me rodean y lo que hago y esto mismo me transmite la pasión y la fuerza, esa seguridad necesaria... Ahora, mi trabajo es mucho más amplio y gratificante. Y el cliente, te valora desde otro punto de vista, no solamente porque cortas un cabello bien o peinas, sino desde una perspectiva más global y profesional, aportándote un valor añadido que te posiciona como agente influyente y necesario, transformador de las personas, su belleza, bienestar y autoestima... Hablamos de excelencia a todos los niveles. Vivo ejemplo de ello son nuestros salones flagship, que son salones, bandera. Donde se busca a la marca, ya que el cliente los elige sabiendo que va a vivir una experiencia inigualable.

Y así queda escrito. I.C.O.N. es una experiencia suprema. Donde éxito y negocio se aúnan y suponen la proyección de cualquier carrera.