Por Darío Gutiérrez, Director Técnico Kadus España
En el utillaje profesional, la superficialidad, la importancia del diseño exclusivo de otros años ha dado paso a la funcionalidad de la actualidad. Hoy, prima fundamentalmente la comodidad, sin olvidar valores anteriores tan importantes como la rapidez y agilidad.
El recorrido de los secadores de mano comienza en los años sesenta a consecuencia de las demandas en los cambios de moda, puesto que nace el concepto de "brushing" (secado a mano con cepillo), realizándose 1 ó 2 servicios al día como máximo.
Sin embargo, hoy en día, el 99% de los trabajos profesionales se realizan con secador de mano.
Sin olvidar también que la mayor parte de las mujeres se peinan en su domicilio 2 ó 3 veces por semana, también con ayuda de un buen secador de mano.
Por tanto, esta tendencia reclamaba una nueva revisión. Principalmente, revisión de dimensiones y peso, puesto que el elevado peso de la mayoría de secadores ha sido el causante de muchas lesiones musculares entre los profesionales de la peluquería.
Por estas razones, la tecnología ha desarrollado nuevos conceptos de secador de mano, herramientas de mínimo peso y proporciones, pero de máxima potencia, tanto en flujo de aire como de calor.