Joan y Craig Lyons se conocieron hace más de tres décadas atrás. Apenas eran unos quinceañeros, cuando iniciaron una bonita y duradera amistad. Al respecto, Craig, también de 44 años, ha reconocido que se enamoró de ella con solo 14 años. El tiempo pasaba y la relación iba a más. Aun así, el camino no fue nada fácil. "Yo era muy tímido. Además, Joan había estado casada con anterioridad. Siempre he sabido que era la mujer de mis sueños", ha confesado Craig. Finalmente, hace apenas 18 meses decidieron convertirse en pareja.
Ambos planeaban casarse a finales de año. Sin embargo, las circunstancias les han obligado a adelantar la boda. El motivo: el cáncer de páncreas que padece Craig se ha vuelto, lamentablemente, en terminal. El gran día tuvo lugar el pasado 15 de abril en el Isla Gladstone Conservatory, en Liverpool.
Tras prometer que estaría al lado de su marido "en la salud y la enfermedad", Joan quiso rendir homenaje a su ya marido y al resto de afectados por enfermedades terminales. Así pues, durante la fiesta, se rapó la cabeza ante los invitados presentes en la emotiva ceremonia. Craig se mostró encantado con el gesto de su mujer. "Era la primera vez que la veía sin pelo y me pareció preciosa, realmente encantadora", afirmó. Asimismo, Craig recalcó el "gran corazón" de su esposa, de quien no le sorprende que realizara un acto solidario durante su boda.
Solidarios con los afectados por el cáncer
La pareja utilizó su gran día para recaudar fondos destinados a varias organizaciones que ofrecen y desarrollan cuidados paliativos para las personas con cáncer y otras enfermedades terminales. Como Macmillan Cancer Support, Zoe’s Place Baby Hospice y Woodlands Hospice. Hasta ahora, han conseguido 2.700 libras. Asimismo, Joan donará su cabello a la ONG Little Princess Trust que confecciona pelucas para niñas afectadas por el cáncer.
El matrimonio no ha dejado de recibir muestras de apoyo y donaciones desde que el afeitado solidario de Joan salió a la luz pública. Con la colecta de fondos, ambos pretenden concienciar acerca de una enfermedad que les ha sorprendido con 40 años, mientras que a la mayoría de los pacientes les llega con 60 años. La recepción también recordó a las 96 personas asesinadas en Hillsborough, en el 27 aniversario de la tragedia, con 96 globos lanzados en honor a las víctimas.
Fotografía:Kimberley Struth.