No importa si uno elige la confianza de Iberia, el prestigio de Air France o el servicio de British Airways. Indefectiblemente y más allá de la aerolínea en cuestión, tendremos que pasar por el puesto de control y dejar todo nuestro equipaje allí para ser examinado. El trámite no finaliza así, pues luego hay que sortear las gracias del escáner corporal, cruzando los dedos para que no suene la alarma en el caso de tener un collar metálico o, peor aún, clavos en las piernas producto de una cirugía.
Por si faltara algo, en algunos casos hablamos de escáneres que muestran el cuerpo. Eso sucede en los aeropuertos de los Estados Unidos y generan más de un dolor de cabeza para los pasajeros pudorosos. Pero para poner fin a semejante martirio, una empresa ha echado cartas en el asunto diseñando ropa interior que impide que se vean las partes íntimas.
Rocky Flats Gear es la empresa creadora de este innovador invento, que cansada de escuchar las quejas de las personas por los escáneares en los aeropuertos estadounidenses, decidieron aprovecharse de esta situación para lanzar su invento.
Las prendas de Rocky Flats Gear son a prueba de rayos X. Allí es posible conseguir sostenes, bragas o calzoncillos, que en las zonas más privadas están realizadas en un material especial que no permite que las radiaciones lo atraviesen.
Las prendas son muy finas y se ajustan perfectamente al cuerpo, por lo que es difícil esconder algo debajo de esas piezas de ropa, según explicó Jeff Buske, de Rocky Flats Gear. La empresa garantiza que sus productos preservan la dignidad de las personas y ofrece una protección contra los peligros de la radiación, otra de las polémicas que ha levantado el uso de los escáneres corporales.
Hay modelos con diseños de hojas de parra que aseguran la privacidad más absoluta de las partes íntimas de los pasajeros, aunque también pueden ser utilizados en escáneres médicos. Los sostenes cuestan nueve dólares, mientras que los tops tiene un precio de 38 dólares. Hay ropa para mujeres, niños, familias completas… Las bragas y los calzoncillos se pueden comprar por 17 dólares. ¡Un precio irresistible!