Con los años, la piel deja de fabricar ácido hialurónico con la misma velocidad que antes y la piel se muestra mucho más reseca, con falta de flexibilidad y confort.
La microcirculación del cuero cabelludo se enlentece, con lo que el bulbo no es debidamente alimentado, por lo que el cabello adelgaza, haciéndose más difícil de peinar y domar. El aceite de Sacha Inchi, que contiene el nuevo milagro multitask de Ángela Navarro, dentro de su línea Adapta, es una planta originaria de la Amazonia peruana, a la que también se conoce como Oro de los Incas o maní jíbaro.
Destaca por contener una elevadísima concentración de interesantes nutrientes como ácidos grasos esenciales, antioxidantes y vitaminas A y E, con lo que beneficia por igual a la piel y al cabello. Sus propiedades son restauradoras y protectoras.
Beneficios para la piel
Este ingrediente regula la hidratación y refuerza su barrera natural evitando la pérdida de agua que afecta a las pieles más maduras, mientras aumenta su elasticidad.
Está especialmente indicado para pieles sensibles, deshidratadas, secas e incluso para pieles inflamadas o irritadas. Se combina a modo de sérum, antes de la hidratante o el tratamiento habitual, o se mezcla con la base de maquillaje para darle mayor jugosidad y luminosidad a la piel.
Para el cabello
Acondiciona y mejora el brillo, y se puede aplicar tanto solo como combinado con otros productos como el acondicionador a diario o la mascarilla una vez por semana, o para añadir unas gotitas de medios a puntas sobre el pelo mojado, actuando como un excelente producto antiencrespamiento.
Destaca su aroma, con extracto de naranja dulce, totalmente natural, que incrementa la sensorialidad de su aplicación, además de reducir el riesgo de reacciones en piel.
El aceite de Sacha Inchi, totalmente vegano, viene a completar al dúo de aceites vírgenes con los que ya contaba Ángela Navarro en su línea Adapta: el aceite de almendras dulces y el de rosa mosqueta.