Después de las vacaciones, los salones de peluquería tienen una misión clara: recuperar el cabello dañado de su clientela con los tratamientos posverano más eficaces y ofreciendo asesoramiento para el correcto cuidado en casa. Cuatro expertos en la materia nos dan las claves para lograr los mejores resultados.
Lo primero, el diagnóstico
"Lo más importante a la hora de tratar el cabello a la vuelta del verano es realizar un buen diagnóstico capilar, en el que deberemos tener en cuenta distintos aspectos: si es un cabello coloreado, con mechas o natural; si se ha cuidado debidamente o no durante estos meses ante la exposición al sol, el cloro o la sal, etc. Si el cabello está castigado, deberemos actuar lo antes posible para recuperarlo, tanto en el salón como en casa. A través del diagnóstico experto, podremos decidir qué tratamientos aplicar y también aconsejar a nuestros clientes cuáles son los productos más adecuados para su mantenimiento diario", explica Anna Barroca, directora del salón Anna Barroca (Andorra).
Cuidado completo
"Los servicios de reparación del cabello son muy demandados en el salón después del verano. Para que sean efectivos, deben proporcionar beneficios tanto sobre el cuero cabelludo como sobre el cabello. De una parte, el cuero cabelludo puede estar más resentido por la exposición al sol y la frecuencia de lavado. De la otra, la melena estará más deshidratada, aclarada y sin brillo. Lo aconsejable es realizar varios servicios seguidos en el salón para devolverle al cabello la hidratación y nutrición perdidos, y, si fuera necesario, refrescar el color con coloraciones suaves, como una coloración sin amoniaco, que reavive el tono pero no lo modifique", sugiere Christian Ríos, director de Salón Christian Ríos Hair Couture (Vilanova i la Geltrú - Barcelona).
Puntas al rescate
"Una de las principales necesidades tras el verano es realizar un corte de cabello para sanear las puntas, que se han podido dañar o deshidratar con el sol y el cloro, entre otros factores. También es aconsejable someterse a tratamientos de hidratación para recuperar el brillo, la flexibilidad y el movimiento. En el salón de prácticas de Peluquería que tenemos en la escuela recomendamos todo tipo de hidrataciones, además de peinados suaves y frescos evitando el abuso del secador. Para el cuidado en casa, recomendaría un buen champú, además del uso de mascarilla y reparador de puntas para que estas se mantengan hidratadas y lubricadas", afirma Pilar Aguilar, formadora de Peluquería Integral de Antonio Eloy Escuela Profesional (Málaga).
Recuperar el color
"Durante la época estival, el cabello está mucho más expuesto al daño y el color suele ser el primer perjudicado, ya que la cutícula se abre o se va desgastando. Por ello, debemos poner a punto el color y realizar tratamientos que protejan y “sustituyan” la cutícula dañada: tratamientos que actúen en el córtex reponiendo los puentes peptídicos y proteicos, y tratamientos que recubran y protejan la cutícula (suelen llevar siliconas solubles, elementos lipídicos u oleicos). En casa, lo principal es seguir una buena rutina de lavado, con un champú específico para el tipo de cabello que tengamos, usar acondicionador en cada lavado y mascarilla una vez cada dos o tres lavados. No puede faltar el protector térmico y deberíamos añadir un spray con protección ultravioleta", recomienda Adrián Pardo, director de Adrián Pardo Hair Studio (Málaga).