Finalizadas las vacaciones, toca volver a la rutina. El cabello, igual que la piel y las uñas, sufre y se deteriora a raíz de las agresiones propias del verano. La melena se vuelve áspera, se encrespa y el brillo desaparece. El verano es el mejor momento del año, pero también uno de los períodos más estresantes para la melena.

Los expertos de Cazcarra Image Group aconsejan cómo tratar y mimar el cabello tras los estragos veraniegos:

CORTA LAS PUNTAS.
De la misma manera que cortamos las puntas antes de verano para sanear el cabello, ahora es necesario repetir esa operación. De esta forma, lograremos que la fibra capilar se conserve en buen estado. No hace falta que se efectúe un corte radical, aunque sí es necesario deshacerse de las puntas abiertas.

CHAMPÚ REPARADOR.
Es aconsejable emplear un champú adecuado al cabello pero que además sea neutro, a base de activos naturales al 100% que no saturen ni le quiten brillo al pelo. ¿Lo ideal? Productos específicos para puntas castigadas que ayuden a recuperar la flexibilidad, la suavidad, el brillo y la hidratación perdida durante los meses de verano.

Para recuperar el cabello tras el verano es necesario deshacerse de aquellas puntas abiertas que no dejan al cabello crecer de forma sana.

MASCARILLAS.
Las mascarillas ayudan a recomponer la textura, humedad, elasticidad natural e hidratación perdida para contrarrestar el daño que ha sufrido el cabello. Por lo tanto, es preciso aumentar la frecuencia de uso de la mascarilla aplicándola dos o tres veces por semana a lo largo de este mes. Una vez recuperado el cabello, se puede usar una sola vez a la semana. Los profesionales de Cazcarra Image Group aconsejan extender la mascarilla desde las puntas hasta la mitad del cabello, evitando que entre en contacto con la raíz para no engrasarla.

TRATAMIENTOS ESPECÍFICOS.
Otra posibilidad consiste en dirigirse al estilista de confianza para que aconseje el mejor tratamiento para el cabello. Cada salón de belleza idea sus propios tratamientos acordes a las necesidades de sus clientes más usuales. Una opción es preguntar cuál es el más adecuado a cada uno.

Las mascarillas ayudan a recomponer la textura, humedad, elasticidad natural y la hidratación perdida para contrarrestar el daño que ha sufrido el cabello.

RECUPERA EL COLOR DEL CABELLO.
Es recomendable compensar el aclarado del tono que se habrá producido a causa de la exposición solar o el cloro de las piscinas. En el salón de confianza explicarán cómo devolver el tono perdido a la melena. En casa, mejor elegir tintes sin amoniaco, formaldehído o parabenos para que el cabello no se deteriore.

PEINA EL CABELLO SIN DAÑARLO.
Utiliza peines y cepillos de materiales naturales que respeten la fibra capilar y lo prevengan contra el encrespado. Hazte con una crema de peinado o acondicionador para ayudarte a desenredar el pelo y no lo hagas a la fuerza: péinalo en una sola dirección hacia abajo, sin dar tirones. ¿El cepillo ideal? Uno de cerdas múltiples sintéticas, ya que ayudan a que el pelo no se rompa y previenen que se dañe la cutícula capilar.

Activos que mejorarán la salud del cabello

Aunque todo depende del tipo de cabello, de sus necesidades y del estado en el que se halle, es preciso que éste luzca sano. En este sentido, cabe buscar cosméticos capilares cuya formulación incluya alguna de las bases siguientes:

Cada salón de belleza idea sus propios tratamientos acordes a las necesidades de sus clientes más usuales.
  • Aceite de almendras. Los nutrientes del aceite de almendras, tales como las vitaminas E, D, A y B, son ideales para que el cabello crezca fuerte y saludable. Son muchos los productos capilares que incluyen aceite de almendras. Este aporta luminosidad y brillo, ayuda a eliminar la caspa, y sobre todo, evita que las puntas sigan abriéndose.
  • Keratina líquida. La keratina líquida ayuda a reconstituir la fibra capilar, haciéndola más fuerte y flexible. Es ideal para reparar el cabello seco y dañado después de las vacaciones. Actualmente, puedes encontrar en el mercado una gran cantidad de champús o acondicionadores que incluyen keratina líquida en sus componentes. Aunque si lo deseas, también puedes hacerte con ella de forma individual y aplicarla directamente en las puntas.
  • Aceite de oliva. El aceite de oliva promueve la salud del cuero cabelludo gracias a sus propiedades antiinflamatorias, antibacterianas y antifúngicas. Un masaje de vez en cuando con aceite de oliva tonifica y nutre el cabello dejándolo más manejable, saludable y vibrante. También se utiliza para prevenir la caspa y la pérdida del cabello.
  • Aguacate. Los aceites naturales del aguacate aportan al cabello su humedad perdida, pero también le proporcionan una hidratación intensa, nutriendo el cuero cabelludo desde la raíz. Además, desencrespa el cabello, refuerza las fibras de queratina y los folículos pilosos, luchando contra la caída del pelo.
  • Aceite de coco. Este producto de origen vegetal se compone de ácidos grasos de cadena media y de sustancias antioxidantes. Actualmente está presente en numerosos productos capilares para revitalizar y reparar el cabello. También estimula su crecimiento y evita el encrespamiento.
  • Aloe vera. La versatilidad del aloe vera y sus propiedades medicinales también te ayudarán a regenerar el cabello después del verano. El aloe vera te ayudará a abrir los poros del cuero cabelludo, permitiendo que los nutrientes y las vitaminas penetren en tu pelo y potencien su brillo. Tu cabello recuperará la hidratación perdida y aumentará la flexibilidad del cabello evitando que se rompa con facilidad.








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