El pasado 19 de junio, el crucero Costa Deliziosa zarpaba de Venecia, con 200 clientes de Intercosmo a bordo, para visitar las costas italianas y griegas. Eran las 17.30 horas cuando los viajeros aprovechaban la ocasión para disfrutar de las espectaculares vistas de la ciudad desde el Gran Canal. Tras la reunión de bienvenida, a cargo de la organización de Intercosmo, en el Teatro del barco, todo el grupo disfrutó de su primera cena juntos en una zona exclusiva, reservada para la ocasión.
La primera parada fue Bari, una ciudad llena de encanto en la que el grupo Intercosmo pudo disfrutar de un tranquilo paseo por la ciudad vieja. El tercer día, en Corfú, recorrieron el casco antiguo con sus murallas y fortalezas; algunos más aventureros se acercaron a sus playas y bahías, de aguas cristalinas y abundante vegetación.
Posteriormente, el crucero hizo parada en Santorini. Una vez allí, los viajeros pasearon por Fira, la capital, trasladándose después al pintoresco pueblo de Oia. Después, bajaron de nuevo al puerto en teleférico donde contemplaron los característicos acantilados de esta isla griega. Durante el quinto día, en Mykonos, algunos se acercaron a la famosa y minúscula isla de Delos, Patrimonio de la Humanidad y famosa por ser considerada, según la mitología griega, el lugar de nacimiento de Apolo y Artemisa. Por su parte, otros prefirieron descansar en alguna de sus famosas playas, sin perderse, por supuesto, el imprescindible paseo por la capital visitando sus míticos molinos y el barrio de la pequeña Venecia.
Tras un día completo de navegación, en el que se llevó a cabo el Campeonato Intercosmo, una competición por equipos que incluía distintas actividades lúdicas, el crucero atracó en Dubrovnik. Los pasajeros pudieron conocer, a fondo, la perla del Adriático, una pequeña ciudad llena de encanto. El viaje finalizó de nuevo en Venecia, el día 26 de Junio. Tras una semana de viaje, cada uno de los pasajeros regresó a su ciudad de origen deseando repetir la experiencia vivida en alta mar.