La firma estadounidense HeadBlade, especialista en cuidado de la cabeza desde 1999, presenta las únicas maquinillas ergonómicas, funcionales y de diseño original del mercado. Las primeras, diseñadas por Todd Greene en 1997, se concibieron como herramientas que hicieran del headshaving (afeitado de la cabeza) un hábito fácil y funcional. Su desarrollo se basó en algunos principios muy simples de diseño. En primer lugar, el usuario debía ser capaz de afeitarse por la sensación. En segundo lugar, la afeitadora necesitaba dos puntos de contacto para crear un efecto de suspensión que permitiera a la hoja pivotar de forma automática. Por último, la afeitadora debía ser compatible con las maquinillas de afeitar existentes, vendidas en la mayoría de establecimientos minoristas. El diseño era pues, algo fundamental. Greene le dio el toque final a este aspecto, al incorporar, a estos utensilios, su afición por los automóviles. El resultado fueron unas maquinillas de fácil manejo, dotadas de un mango ergonómico. Y con un aspecto muy visual, que no pasa inadvertido al consumidor.
Hoy en día, las maquinillas HeadBlade se emplean para el afeitado de la cabeza y también de otras zonas del cuerpo. Su manejo es sencillo: solo hay que introducir el asa o mango alrededor del dedo anular. A partir de aquí, solo queda deslizar la maquinilla por la cabeza con las ruedas traseras apoyadas en el cuero cabelludo. Se obtiene un afeitado limpio y muy apurado desde cualquier ángulo. La frecuencia de uso no es un impedimento: con estas maquinillas se evita la irritación de la piel.
Estos utensilios se presentan en dos versiones: Razor y ATX. El primero proporciona el headshaving más rápido del mercado. El segundo se comercializa en varios colores: negro, amarillo, azul y rosado. Este último se asocia con causas benéficas a las que se dona parte de las ventas; aunque no necesariamente de forma exclusiva.
La duración de las cuchillas es similar a las de cualquiera de las mejores marcas en el mercado mundial: Harry's, Schick, Wilkinson, etc. Las cuchillas, fabricadas en Corea para la firma HeadBlade, son compatibles con algunos modelos de cuchillas fabricadas por Gillette. Actualmente, los productos de HeadBlade se venden en los Estados Unidos en más de 15.000 puntos. También se comercializan en más de 40 países distribuidos en todos los continentes.