La estilista Ana Álvarez Suárez cuenta con 30 años de trayectoria dirigiendo el salón Llongueras de Oviedo, situado en la céntrica calle Juan Benito Argüelles. Aprovechando el aniversario de su inauguración, repasa los hitos de su carrera y cómo ha evolucionado la firma a lo largo de este tiempo, que siempre ha mantenido su máxima de calidad en los servicios y ha perseguido ser un referente en las tendencias.
La estilista declara que lo que le animó a unirse al equipo de Llongueras fue su filosofía de trabajo y el hecho de ser una firma icónica en el sector de la peluquería. Lluís Llongueras siempre fue su referente y su inspiración: carismático, transgresor y artista. Entrar en el universo Llongueras supuso formar parte de un equipo moderno y actual, siempre a la vanguardia.
Sus inicios en formación comenzaron con cuatro intensos meses de preparación en Barcelona, donde se encontraban las oficinas y la escuela. Su tutor y mentor fue Jordi Vázquez, al que siempre estará agradecida por todo lo que le enseñó durante los meses de aprendizaje en la capital catalana. Si le preguntamos cómo definiría el estilo Llongueras lo califica de actual, dinámico, apto para cualquier edad, divertido y sobre todo muy personalizable.
En los salones Llongueras, se pueden conseguir las últimas tendencias en coloración y tratamientos siempre con el toque distintivo de la firma.Los franquiciados como Ana reciben una formación constante a través de seminarios donde se les presentan las novedades y colecciones de cada temporada. Continuamente conocen nuevas técnicas y productos a través de tutoriales y vídeos explicativos. En concreto, a la estilista le encanta estar al día de las tendencias a través de la prensa y de las redes sociales.
30 años de compromiso
Sin duda, la localización y el hecho de ser un salón abierto al exterior con acceso directo a través de dos calles principales, ha sido uno de los motivos que le han ayudado a mantenerse durante tantos años. Pero la carta de servicios y la calidad de los mismos, ha sido siempre la principal premisa para atraer al público. Además, la atención al cliente es clave.
Un servicio de vanguardia.
Durante muchos años, la clientela del salón eran principalmente mujeres de clase media alta, que acudían semanalmente a su cita en la peluquería para asistir a fiestas y eventos en los que querían lucir perfectas.
Actualmente, el público se ha ampliado y visitan el salón hombres y mujeres jóvenes que quieren cuidar su imagen con las últimas técnicas y los mejores productos. Lo que nunca ha cambiado es la filosofía, el saber hacer de la herencia que deja un artista del cabello como Lluís Llongueras, su escuela de estilistas y su pasión por vivir el oficio de la peluquería.
Los nuevos servicios y las técnicas más vanguardistas han sido otro de los reclamos del salón, sobre todo para atraer a la gente joven, donde las redes sociales, afirma Ana, han jugado un papel muy importante para darse a conocer y ampliar así su target.
Si viajamos por uno momento al futuro, y le preguntamos cómo se imagina el salón dentro de 10 años, Ana asegura que se potenciará la clientela mixta donde el hombre acudirá aún con mayor frecuencia al salón. Desea que su salón continúe siendo un referente en la ciudad y poder ofrecer los servicios durante como mínimo otros 30 años más.
En cuanto a las nuevas tecnologías, confía totalmente en los beneficios que traen consigo, gracias a la cita previa on-line, disponible en la APP de Llongueras, se evitan tiempos de espera innecesarios y favorece el ritmo y la organización del salón.
Todo son beneficios, comenta que uno de sus proveedores, la firma de productos profesionales Kérastase, que ha lanzado un servicio de diagnóstico capilar que cuenta con una cámara de última tecnología que permite un análisis exhaustivo del cabello. Esto les ayuda a conocer el estado y el tipo de cabello: si está débil, si el cuero cabelludo se encuentra escamado, el estado de la cutícula... Y también facilita la recomendación de los productos más adecuados para el cuidado del cabello en casa.
Los nuevos servicios y las técnicas más vanguardistas han sido otro de los reclamos del salón, sobre todo para atraer a la gente joven, donde las redes sociales, afirma Ana, han jugado un papel muy importante para darse a conocer y ampliar así su target.Las RRSS les permiten estar en contacto con sus clientes, preocupándose por su cabello, ayudándoles y aconsejándoles. Esto, sin duda, repercute de forma positiva en el tráfico al salón, manteniendo su confianza.
Cuidado del cabello y servicios exclusivos.
La estilista recomienda una limpieza diaria con un champú adecuado a las necesidades del tipo de cabello. En las mujeres, es imprescindible la nutrición y la hidratación que se consigue con el uso del acondicionador y la mascarilla (al menos una vez por semana), la protección térmica es clave para evitar la deshidratación y que el cabello se rompa.
Los caballeros, suelen tender a la pérdida de cabello, por eso es fundamental que cuiden el cuero cabelludo a través de lociones específicas para este problema y mantener así su salud.
En cuanto a los servicios que más se solicitan en el salón están el corte y la coloración. Wild Blond es una de las técnicas exclusivas de los salones Longueras más demandadas. El tratamiento de keratina es uno con el que las clientes se declaran más satisfechas.
En los salones Llongueras, se pueden conseguir las últimas tendencias en coloración y tratamientos siempre con el toque distintivo de la firma, para no perder nunca la esencia y conseguir un resultado hiperpersonalizado.
Alianza con el grupo Provalliance.
Ana se siente orgullosa de pertenecer a la casa Llongueras y por la reciente unión al grupo Provalliance. Afirma que este acuerdo ha traído consigo muchos beneficios y mejoras para la imagen de marca, además del objetivo común de conseguir una clienta satisfecha con el trabajo que se le realiza.
La tranquilidad del respaldo de Provalliance, un grupo internacional que aporta prestigio y confianza, es sinónimo de un trabajo bien hecho, seguridad de cara a su clientela y la confianza de los mejores profesionales.