Desde hace unos años, la barbería Old School, inspirada en las técnicas más clásicas, ha contribuido a revitalizar el sector a nivel global. El regreso a la barbería tradicional, en cuanto a decoración y técnicas de corte, hace furor en numerosos países, incluido el nuestro, tal y como aseguran los tres barberos entrevistados: Vicenç Moretó, de La Barbería; Jordi Pérez, de La Barberia de Gràcia y Paco López, de The Barber Shop. "El estilo Old School ha contribuido a revitalizar el sector y también a la formación continua del barbero actual, quien ha sabido adaptarse a las necesidades del cliente actual: un hombre que mira sin prejuicios por su imagen. Tenemos barbería Old School para largo", asegura Paco López. Una opinión que comparten el resto de sus compañeros consultados.
La barbería 'Old School' se basa en un concepto de corte de cabello clásico, aunque se podría considerar tradicional y atemporal."Los que llevamos muchos años en el oficio, recordamos que la barbería/peluquería masculina era el patito feo de la profesión, incluso se utilizaba el término barbero como algo despectivo. En aquel momento, el sector ni se recicló, ni supo ofrecer a los clientes lo que ellos pedían y querían: estilos jóvenes, urbanos, colores, trabajos técnicos y tendencias del momento. Así pues, los clientes se acercaron a las peluquerías unisex en busca de profesionales que daban respuesta a sus inquietudes por su imagen. Las barberías más clásicas empezaron a ver cómo su volumen de trabajo se reducía cada vez más y el prestigio profesional también caía a la misma velocidad que perdían clientes", explica Jordi Pérez. En consecuencia, el Old School ha significado el resurgir de las técnicas barberas clásicas y la dignificación del sector, tan denostado hasta el momento.
El esplendor de esta barbería se debe a la crisis económica que nos sacudió hace ahora 10 años. "Todo aquello que fuera retro y vintage se empezó a valorar. Lógicamente, la barbería encajaba como anillo al dedo dentro de esta tendencia", declara Pérez.
Una barbería tradicional pero atemporal
La barbería Old School se basa en un concepto de corte de cabello clásico, aunque se podría considerar tradicional y atemporal, según Vicenç Moretó. "Se caracteriza por degradados muy limpios y cortes más estructurados o peinados en zona superior", comenta.
La barbería 'Old School', inspirada en las técnicas más clásicas, ha contribuido a revitalizar el sector a nivel global.Por lo tanto, el Old School deja algo más de volumen en la parte superior que en los lados, proporcionándoles la máxima verticalidad posible. O sea, que buscamos un perímetro cuadrado, achatado en los lados. A partir de ahí, se le pueden aplicar todas las variaciones posibles, cortes conectados o desconectados, volúmenes exagerados en la zona frontal, medidas muy cortas, o incluso afeitadas en los parietales. "Cabellos dirigidos a los lados o hacia atrás, pero a ser posible que, en la transición de los lados con la parte superior de la cabeza, haya un degradado, un fade. El fade se ha convertido en el gran protagonista de la barbería de estos últimos años", describe Pérez.
Los orígenes se remontan a los años 20. La falta de salubridad e higiene masculina obligó a optar por una serie de cortes que duraran más tiempo en el cabello. "En consecuencia, la mayoría se decidieron por rasurados en los laterales y nuca, dejándose el cabello más largo y con pomada, a base de petrolatum, arriba. Posteriormente, durante los años 40 y 50 se suavizó el largo en la zona superior de la cabeza y también los cortos en laterales y nuca. Aun así, siguió como un corte estrella y elegante", explica Vicenç Moretó. La gran mayoría de cortes Old School se produjeron durante los años 50, según Pérez, López y Moretó.
Dos corrientes diferenciadas
Algunas fuentes diferencian entre dos corrientes dentro del estilo Old School: una más rockabilly con cortes como el Pompadour o tupé, el Mohawk o cresta, el Ivy League (raya lateral), el Bowl Cut (a tazón) y otra de influencias militares, con cortes muy cortos como el cepillo afeitado (horshoe flattop), el cepillo militar (military flattop), el cepillo redondo o recon, el afeitado Norelco u Oster de cinco ceros (clipper shave) o el afeitado total con navaja (razor shave), por ejemplo. A los cortes mencionados, los tres barberos añaden el Executive Contour, quizás el más "gentleman", en opinión de López, y uno de los más demandados en sus barberías. "Disfruto mucho con todos los cortes pero el que más me gusta es el Executive Contour, con los laterales y la nuca muy pulidos", reconoce.
'El estilo 'Old School' ha contribuido a revitalizar el sector y también a la formación continua del barbero actual, quien ha sabido adaptarse a las necesidades del cliente actual', asegura Paco López.Moretó y Pérez también nos comentan los cortes que triunfan en sus barberías. "A nosotros nos piden mucho los Fades en todos sus estilos: low, médium y high. Los reyes son el Executive Contour, por la elegancia que aporta, y el famoso Pompadour. De todas maneras, las cosas están cambiando y los cortes también", explica Moretó. "Sin duda alguna el más demandado es el Pompadour, aunque últimamente el volumen que dejamos en la zona superior es menor que en temporadas anteriores. Es un estilo muy masculino y favorece a la mayoría de nuestra clientela. También debo de añadir que es mi favorito, pese a que en La Barberia de Gràcia ya llevamos un tiempo experimentando con otro tipo de tendencias más innovadoras y actuales", dice Pérez.
El estilo Old School que viene
En suma, la tendencia Old School tiene mucho recorrido por delante, aunque convivirá con otras tendencias a base de melenas medias y largas. Los tres barberos nos avanzan hacia dónde va el Old School y que se llevará durante este año que acaba de empezar.
Jordi Pérez: "En lo que se refiere a Old School nos decantamos por medidas extremadamente cortas en lo lados y la zona posterior de la cabeza y una medida más larga en la parte superior, entre dos o tres dedos, con una ligera desconexión en la transición de estas dos medidas. Vamos a ver tupés con menos volumen y más desestructurados, peinados más espontáneos y acabados mates. También, y dentro de las medidas cortas, se llevarán cortes más desconectados en la zona de transición".
- Trabajar con Clipper todo el perímetro de la cabeza, realizando un degradado desde el 1,5 hasta el afeitado de los contornos.
- En la zona de transición eliminar peso, pero sin conectar por completo las dos medidas, aunque sí buscaremos la máxima verticalidad posible.
- Cortar punteando la zona superior y texturizar en slice con las tijeras.
- Retocar el flequillo y repasar (si hace falta) la zona superior con la styling razor.
Vicenç Moretó: "Quizás el corte estrella se conseguirá combinando ambas corrientes, de manera que la máquina trabaje con medidas menos cortas, mientras que en las zonas superiores vamos a texturizar tanto con navaja feather como con tijera. La navaja la usaremos en zonas elevadas, dejando más largo en el área del flequillo, pero cambiaremos la famosa pomada por polvos de textura o cera mate".
- Fade desde 0 ó 0 y medio hasta zona 2 o cambio de plano.
- Conectamos con máquina hasta zona 3 y panelamos la zona superior hacia zona 4 sin dejar de texturizar.
- Procedemos a peinar.
- Cortamos desde cero e incluso con la maquina shave la zona baja de laterales y nuca, la zona intermedia irá de menos a más hasta llegar a la curvatura de la cabeza con seis milímetros.
- Cortar a tijera la parte superior y texturizar con la navaja, para terminar personalizando la zona del flequillo a tijera o navaja.
Paco López: "Estos cortes dan mucho juego a la hora de ejecutarlos, así que todo dependerá de nuestra creatividad. Quizás uno de los cortes que más veamos este año sean laterales y nuca muy cortos con la zona de flequillo corto o desfilado".