Un grupo de inversores financieros locales adquirirá las operaciones del gigante del cuidado personal en el país, incluidas Augment Investments, Kismet Capital Group y Elbrus Services.

Las autoridades rusas aprobaron el acuerdo, pero aún no han confirmado una fecha de finalización.

"Todos los compradores han establecido relaciones comerciales de larga data en países occidentales y no están sujetos a sanciones de la UE o Estados Unidos", ha dicho Henkel en un comunicado.

Henkel originalmente defendió su decisión de continuar operando en Rusia después de su invasión de Ucrania en febrero de 2022.

El conglomerado alemán comentó en ese momento que una retirada total podría tener consecuencias "descabelladas", teniendo en cuenta los 2.500 empleados que tenía en el país.

Sin embargo, la compañía anuncia oficialmente su decisión de abandonar sus operaciones en Rusia este mismo mes de abril de 2023.

Henkel se une al número de otras empresas de belleza que han reducido o detenido las operaciones en respuesta a la guerra.

Estée Lauder dejó de comerciar en Rusia en las primeras dos semanas de la invasión y confirmó en octubre de 2022 que estaba suspendiendo los negocios en el país.

En julio de 2022, Sephora vendió el 100% de las acciones de su filial rusa al gerente general local de la empresa.

Desde entonces, la cadena minorista de belleza, propiedad de LVMH, ha operado bajo la marca Ile de Beauté en el país. Unilever, mientras tanto, se ha enfrentado a una reacción violenta en los últimos meses por su decisión de continuar haciendo negocios en Rusia.

La compañía anunció un aumento de ventas subyacentes del 9% para todo el año 2022, pero los analistas detectaron que Unilever tenía una posición de activos de 900 millones de euros en Rusia.

Las operaciones comerciales en el país habían contribuido al 1,4% de la facturación y al 2% del beneficio neto del grupo.

"Entendemos por qué hay llamados para que Unilever abandone Rusia", ha comentado el gigante de FMCG en un comunicado en ese momento.

"Todos los compradores han establecido relaciones comerciales de larga data en países occidentales y no están sujetos a sanciones de la UE o Estados Unidos", ha dicho Henkel en un comunicado.

"También queremos dejar claro que no estamos tratando de proteger o administrar nuestro negocio en Rusia. Sin embargo, para compañías como Unilever, que tienen una presencia física significativa en el país, salir no es sencillo".

El goliat de bienes de consumo confirmó recientemente que está creando una nueva planta de producción de 20 millones de euros en la región ucraniana de Kiev.

Unilever asegura que la nueva fábrica ucraniana apoya su compromiso a largo plazo con el país, además de celebrar su 30 aniversario de operar allí.









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