En un ambiente cálido y vintage, el catalán Guillaume Fort recibe a sus clientes en su barbería de Saint Estève, una ciudad de 12.000 habitantes situada en el corazón de los Pirineos Orientales. Un espacio cuidado hasta el más mínimo detalle que responde a las necesidades de los hombres más exigentes, aquellos que buscan la distinción y la elegancia.
Guillaume Fort.(Foto: Instagram @fortguillaume)
Un gran parquet de lamas, madera en las paredes, un sofá Chesterfield XXL de 12 metros de largo y 6 sillones de barbero Takara Belmont colocados en fila para trabajar por parejas... Todo ha sido diseñado para el bienestar masculino. Otro elemento central del salón es la magnífica barra en medio del espacio que añade convivencia a este lugar tan acogedor. Así es el universo Old School de la barbería Guillaume Fort pour l'Homme.
Y es que Fort sabe perfectamente que sus clientes merecen el mejor servicio profesional en un lugar privilegiado, donde sentirse cómodos y especiales. Una oportunidad para viajar en el tiempo, pero obteniendo un asesoramiento vanguardista inspirado en las últimas tendencias. Entre sus servicios personalizados destacar el corte de pelo, el peinado, el arreglo de barba, el cuidado facial o el afeitado a la antigua.