Equipo Vegas: 'Los salones deberán definirse entre ofrecer un servicio de calidad o un precio bajo'

Paco, Félix y Jorge son tres hermanos que, en 1978, decidieron unirse para crear Vegas, una peluquería situada en Mataró, Barcelona. Con el paso del tiempo, comenzaron a cosechar éxitos en diferentes campeonatos de peluquería (Cataluña, 1980 y 1983, España en 1985). El éxito de sus creaciones le permitieron abrir un segundo local, un tercero, un cuarto... y hasta un Centro de Formación de Alta Peluquería.

Beauty Market les ha entrevistado para que nos hablen un poco más sobre ellos y sobre la situación actual y futura del sector. Sin duda, sus conocimientos sobre formación y el negocio de la peluquería nos pueden servir para orientarnos sobre el "proceso de cambio" en que se encuentra actualmente la peluquería española.

Beauty Market: ¿Cuáles fueron vuestros inicios?
Equipo Vegas: Nuestros inicios fueron en un pequeño local, de alquiler, con un lavacabezas y tres sillones. Empezamos como "Hnos. Vegas Peluqueros”" para luego pasar a "Vegas" por el apellido.

B.M.: ¿Cómo nació el equipo Vegas?
E.V.: El equipo Vegas nació con Francisco Vegas (Paco), Félix Vegas y Jorge Vegas, que somos los tres hermanos.

B.M.: ¿Cuál ha sido el momento clave de Vegas?
E.V.: Creemos que ha sido, y sigue siendo, la trayectoria del trabajo día a día, siempre con ganas de superación, manteniendo la ilusión desde el primer salón, luego el segundo, el tercero... y la apertura del Centro de Formación.

B.M.: ¿Cómo os definiríais?
E.V.: Nos definimos como personas a las que nos gusta la profesión que hemos elegido y responsables en nuestras decisiones.

B.M.: ¿Dónde encontráis la inspiración?
E.V.: La inspiración la encontramos, como decía Picasso, en el trabajo y, sin duda, observando la calle: cómo viste la gente, cómo se peinan... también viajando, en revistas de moda, videoclips, locales de moda, etc.

B.M.: ¿Cuál es vuestra máxima?
E.V.: Nuestra máxima es ir paso a paso, intentando mejorar día a día sin perder de vista el camino conseguido.

B.M.: ¿Qué es lo que más os gusta de vuestra profesión?
E.V.: Hay varias cosas que nos gustan, pero fundamentalmente el trato con las personas y conseguir que, con un buen corte, color y una buena forma, podamos hacer feliz a una persona.

B.M.: ¿Quién ha sido vuestro referente?
E.V.: Nuestros referentes han sido varios, desde amigos que estaban en la profesión y que eran mayores que nosotros, por sus buenas formas de hacer, así como clientes y profesionales de renombre que tenían éxito por la manera de innovar y gestionar... y, sin duda, nuestros padres, que supieron conseguir que nosotros tuviéramos unos buenos principios, manteniéndonos unidos.

B.M.: ¿Quienes son vuestros principales clientes?
E.V.: Nuestros principales clientes son todos lo que vienen a solicitar nuestros servicios: personas jóvenes, de mediana edad, mayores; gente con poder adquisitivo más alto o más bajo, sean hombres o mujeres, etc. Siempre hemos tenido claro que realizamos un servicio por el que nos pagan, y debemos dar valor a todos los clientes esforzándonos en que se sientan cómodos y pensando que el boca a boca es la mejor publicidad.

B.M.: ¿Quiénes son los mejores peluqueros en España para vosotros?
E.V.: Es difícil decir nombres sobre los mejores; creemos que el buen peluquero es el que combina bien la parte técnica-artística con la buena gestión del salón. Hemos conocido a buenos peluqueros que tienen estas cualidades. Nosotros somos miembros del Gremio Artístico desde nuestros inicios, así como socios de asociaciones profesionales y del Club Fígaro, un club con mucha proyección y en el cual creemos que están los mejores peluqueros de España actualmente.

B.M.: ¿Cómo definiríais la peluquería Española?
E.V.: La peluquería española está como el país, en una fase de cambio. Cuando nosotros comenzábamos, existía la barbería para los hombres y la peluquería para las señoras. Los hombres acudían a la barbería a cortarse y afeitarse, y las mujeres a peinarse cada semana. Luego, en los 80, entró la peluquería unisex y nosotros aprovechamos este fenómeno, pudiendo atender a hombres y mujeres en un mismo salón. Actualmente estamos en un proceso de cambio donde creemos que la especialización tendrá éxito y, por lo tanto, se va a producir un cambio donde no todo vale, apostando por profesionales mejor preparados y especializados.

B.M.: ¿Qué es lo mejor y lo peor de la peluquería española?
E.V.: Lo mejor es que quedan empresas que siguen apostando por mejorar el sector, así como asociaciones, clubes y revistas que se preocupan por los peluqueros. Lo peor, los que utilizan la peluquería simplemente como negocio, sin ningún tipo de ética, con precios bajos desprestigiando el sector. Son personas que no sienten la profesión y que suelen acabar quemando a la gente joven. Por eso decía que estamos en un momento de cambio donde no todo va a valer.

B.M.: ¿Cómo está el nivel de la peluquería española?
E.V.: A nivel general creemos que está bien. En España se encuentran buenos peluqueros en ciudades importantes, pero también en provincias e incluso en pueblos.

B.M.: ¿Está devaluada la profesión?
E.V.: Si la comparamos con la moda de ropa, sí. La industria textil tiene más impacto mediático. Cuando lees revistas de moda como Vogue o Elle, resulta curioso observar que en las pasarelas de moda suelen aparecen propuestas de peinados realizadas por diseñadores de ropa, y nos sabe mal que no aparezcan peluqueros. Creemos que, mediante la ayuda de las empresas del sector, asociaciones y clubes se puede conseguir que cada día se pueda reconocer mejor al peluquero. De todas maneras, creemos que hemos mejorado, aunque queda aún trabajo por hacer.

B.M.: ¿Qué creéis que le falta a la peluquería española para tener mayor presencia internacional?
E.V.: Hacer que nuestras colecciones se publiquen en revistas internacionales para que nos conozcan, y ser concientes de que aquí también se hacen las cosas bien. Valorando nuestro trabajo.

B.M.: ¿En que país están los mejores estilistas?
E.V.: Nosotros admiramos mucho a los peluqueros ingleses y americanos, por su capacidad técnica y como han sabido venderse al exterior. Aunque aquí, en España, también tenemos muy buenos estilistas.

B.M.: ¿Cuáles consideráis que son los principales centros de tendencias?
E.V.: Los principales centros de tendencias están en cualquier punto del planeta. Ciudades como Londres, París, Nueva York, Madrid o Barcelona, donde la variedad de culturas sirven como referencia de tendencias.

B.M.: ¿Qué es lo que se lleva ahora?
E.V.: La naturalidad, comodidad y el estilo personal es lo que se impone. Ya no valen las dictaduras ni ir uniformados, por eso creemos que cada persona debe interpretar su propio estilo siguiendo las tendencias.

B.M.: ¿Qué es lo que viene?
E.V.: Es difícil prever lo que viene... Para el hombre, los estilos de corte depurado y nucas difuminadas que nos recuerdan a los más puros estilos tradicionales de la barbería. Es una mezcla de técnicas y conceptos de corte texturados, cómodos y versátiles, donde el corte es el principal protagonista. Para la mujer, colores que armonizan con contrastes naturales, en rubios, marrón rubio, rojos luminosos y líneas de corte muy definidas, en medidas que van del corto al largo apostando por una mujer femenina, seductora.

B.M.: ¿Hacia dónde va la peluquería?
E.V.: El cliente cada vez pide una calidad superior, por lo tanto creemos que vamos hacia salones donde se cuiden todos los detalles para complacer a los clientes, que serán más exigentes. También la peluquería va hacia los salones de un perfil bajo, donde el precio es lo importante, lo que llamaríamos las peluquerías low cost. Creemos que cada salón deberá definirse apostando en ofrecer un buen servicio de calidad o un precio bajo a una menor calidad. Estar entre medio de estos dos tipos creemos que es inviable.

B.M.: ¿Cuál es vuestro proyecto futuro?
E.V.: Seguir apostando por la calidad, innovando en pequeños detalles, apostando por nuestra formación y la de nuestros colaboradores.