El Hospital Universitario Ramón y Cajal ha llevado a cabo, por primera vez en el país, un trasplante capilar reconstructivo a una mujer de 64 años diagnosticada de lupus cutáneo desde hace más de 20 años. La paciente sufría alopecia cicatricial en el 30% del cuero cabelludo, por lo que debía llevar peluca. Además, se ha operado a un hombre de 67 años que carecía de una de las dos cejas como secuela de una intervención quirúrgica previa por cáncer de piel. Para Sergio Vañó, dermatólogo y coordinador de la Unidad de Trasplante Capilar Reconstructivo, esta técnica, puesta en marcha en un hospital, abre una nueva línea docente, asistencial e investigadora dentro del campo de la Dermatología.
Sergio Vañó Galván, dermatólogo y coordinador de la Unidad de Tricología y Trasplante Capilar del Hospital Ramón y Cajal.Hasta la fecha, se han llevado a cabo estas dos intervenciones a pacientes con alopecias cicatriciales o secundarias resultado de intervenciones quirúrgicas por cáncer. Se trata de casos complejos de alopecias cicatriciales y cicatrices de secuelas quirúrgicas oncológicas. Se pretende mejorar la calidad de vida de los pacientes.
La Unidad está formada por profesionales especializados en este tipo de intervenciones. Es decir, tres dermatólogos, dos enfermeros y una auxiliar de enfermería. Todos ellos están especializados en tricología, la rama de la dermatología que se ocupa de los problemas capilares, principalmente de los diferentes tipos de alopecia.