Una peluquería de Londres, muy cercana a la embajada de Corea del Norte, ofendió a sus vecinos con una acción publicitaria que utilizaba la imagen de su joven líder. El dueño de la peluquería, Mo Nabbach, creó un cartel promocional que mostraba una imagen de Kim Jong-un y su característico corte de pelo, con el lema: "¿Mal peinado? 15% de descuento en cortes de pelo para hombres durante todo el mes de abril".
Este cartel pronto llamó la atención de los miembros de la embajada norcoreana, que exigieron al dueño la retirada del mismo. Mo Nabbach, sin embargo, se mantuvo firme y contactó con la policía londinense frente a las amenazas. El incidente no escaló a más, y ha quedado en una nota curiosa para el salón y una pequeña atracción turística.
Esta noticia ha recordado que Corea del Norte, bajo un régimen comunista militar muy estricto, incluso controla los cortes de pelo de sus ciudadanos. Todo aquel que acuda a una peluquería para un cambio de peinado debe escoger de entre un catálogo de 28 estilos aprobados por el gobierno, 10 para los hombres y 18 para las mujeres.
Todos estos peinados, muy similares, siguen las mismas reglas de comodidad e igualdad por encima de la estética: el cabello del hombre no puede sobrepasar los 5 centímetros de longitud, quedando prohibido el pelo largo o peinado en forma de tupé o punta. Por su parte, el cabello de las mujeres depende de su estado civil, por lo que las chicas solteras no pueden llevar el pelo ni largo ni recogido.
Esta situación contrasta fuertemente con la que se puede observar en la vecina y liberal Corea del Sur, donde el sector de la belleza mueve millones en ambos sexos.