Las navidades ya van dejándose caer en celebraciones y numerosas propuestas para moda y belleza. Parece que el mundo sigue inspirándose en lo bello para buscar algo de serenidad en medio de un panorama bélico y violento como estamos viviendo. Por ello, este momento también afecta en cierto modo a lo que queremos transmitir con el cabello y se trata, como explican algunos de los estilistas del salón The Beauty Concept Hair, de mantener la discreción en los looks, que al menos sean y supongan un guiño a esa templanza.
Por ello, hemos recogido cuatro propuestas que son toda una declaración de intenciones. ¿La mejor? Un cabello cuidado, bonito, luminoso, pero que parezca que ha conseguido ese efecto de forma natural, “como si no hubiera pasado por el salón”, apunta Paz Torralba.
Se trata del lujo silencioso, también en el cabello
» Cabello de lujo tranquilo.
No podemos obviar la corriente que implantó la llegada del corte Bob para posicionar el corte limpio, seco, simple y favorecedor en todos los salones. Pero no se trata de una simpleza sinónimo de abandono, sino todo lo contrario: nos referimos a cabellos que, de manera discreta, lucen llenos de vida, con colas de caballo voluptuosas pero sin descaro y ondas cepilladas muy bien cuidadas, pero que no parezcan forzadas: lo obvio ya es agua pasada en moda y en belleza. La naturalidad de lo que es cualitativo, pero sin ser pretencioso. El cabello pulido y lujoso, aquel donde no sabes si se ha invertido en él una alta o baja cantidad económica porque no es un acabado obvio, solo se ve sano, fresco, bonito…
» El corte mixie.
A medio camino entre un corte salmonete y un corte duendecillo, el Mixie ha sido un favorito underground desde hace algunas temporadas. Es una combinación de la Meg Ryan de los años noventa y el niño patinador que nos cruzaremos mucho esta Navidad, por ejemplo.
Este corte aporta un movimiento ligero y suave en la parte posterior del cabello y algunas piezas estilo cortina en la delantera. Una apuesta innovadora, pero sin grandes alardes de modernidad porque, insistimos, buscamos peinados favorecedores, pero sin estridencias.
» Flequillo que deja ver las cejas…
Podemos afirmar que el flequillo peek-a-brow es el estilo más cool para probar ahora, tal y como reflejan prestigiosas revistas y muchas presentaciones con alfombra roja. Se sitúa por encima de la línea de las cejas, pero no es un microflequillo. Tiene una forma más fuerte, pero se pueden agregar bordes más suaves para mayor versatilidad. Todo un juego de formas.
» Cabello fluido.
Se trata de apostar por el pelo liso, con movimiento de ondas de agua, una vez más, como defensa del cabello bien tratado, hidratado y que elige formulas que lo mantienen bajo control. Solo tenemos que ver a la supermodelo Naomi Campbell y su belleza rematada en una impoluta melena que brilla tanto como su piel. Esta época es perfecta para dejarnos llevar por este efecto liso tabla.
» Bob afeitado.
El Bob es ya, como sabemos, un clásico perenne. Pero con cada temporada llega un matiz que distingue cada nueva versión del look de la anterior. Uno de los cortes más buscados del otoño es el Bob afeitado, un estilo desgastado que se crea utilizando una navaja de afeitar, en lugar de tijeras.
Utilizar tijeras crea una apariencia mucho más nítida y precisa, pero esta nueva opción es como si el cabello hubiera sido cortado hace unos meses y estuviera en un proceso algo loco en su crecimiento. Es ideal para combinar con un jersey de cuello alto que dulcifique el rostro que lo elija.
» Corte fantasma.
Podemos decir que es el corte perfecto para quien no quiere que se note que ha ido a la peluquería. ¿Y esto cómo se consigue? Es un corte (en cabellos más largos) que presenta una forma apenas perceptible alrededor del rostro y cuyo objetivo no es perder la longitud, aunque cortemos algunas capas muy sutiles para crear forma, pero sin afirmar que te has cortado el pelo porque la meta es que el efecto se haya conseguido sin esfuerzo.