Si algo nos ha dejado este 2020, es una forma de pensar y actuar inusual en nosotros. Hemos recuperado valores que se estaban perdiendo y hábitos que estaban cayendo en desuso por falta de tiempo como leer, cocinar, estudiar, dibujar, etc.
También, esta crisis ha hecho que la frase "no sabes lo que tienes, hasta que lo pierdes" cobre más sentido que nunca. "Lamentable y necesariamente se paralizaron algunas libertades fundamentales que nos hicieron darnos cuenta de lo privilegiados que somos", reflexiona el grupo Provalliance de peluquerías.
'Las personas nos han demostrado que la peluquería es un sector necesario y en auge, y que los peluqueros, más que profesionales de belleza, son sus confidentes y en quienes depositan su confianza para estar más satisfechos y felices consigo mismos', según Frédéric Logodin.Tal ha sido la transformación, que ha influido directamente en el sector. Hoy, sin ir más lejos, conocemos que entre las búsquedas más habituales realizadas este 2020, según Google Trends, se sitúa, "¿Cuándo abren las peluquerías?", ocupando en concreto el puesto número 2 en búsquedas relacionadas con la palabra "cuándo".
Puesta en valor de la peluquería y sus profesionales
Desde el propio grupo Provalliance (Llongueras, Jean Louis David, Franck Provost y The Barber Company) analizan este hecho como una puesta en valor del papel que los peluqueros y los salones tienen en la vida de las personas, ya que no solo crean cortes, peinados, color; sino también son un apoyo en el terreno emocional, refuerzan la identidad de las personas, les ayudan a verse bien y sentirse mejor con ellos mismos, más felices.
Según Frédéric Logodin, CEO de Provalliance España, "Hemos pasado por un año muy difícil para muchos sectores y, en concreto, la peluquería se ha visto muy afectada. Pero si algo sacamos en positivo, es que las personas nos han demostrado que la peluquería es un sector necesario y en auge, y que los peluqueros, más que profesionales de belleza, son sus confidentes y en quienes depositan su confianza para estar más satisfechos y felices consigo mismos".
Por parte del citado grupo, para ayudar a los peluqueros y franquiciados durante el 2020, se prepararon medidas que pasaron por "negociar ajustes de condiciones con los proveedores y en los alquileres de locales; durante el confinamiento, se ofreció cursos online a los profesionales para que refrescaran conocimientos y, así, estar actualizados para la vuelta. Por otro lado, se creó un sistema de cita previa on-line apoyada con formaciones para que, ante la reapertura, los negocios pudiesen equilibrar los recursos y personal necesarios para responder de forma ajustada a la demanda, minimizando riesgos. También se desarrolló y facilitó el protocolo de seguridad más exigente, acompañado de vídeos de formación y merchandising explicativo, así como asegurando la disponibilidad de EPIS".
Lo último que se ha implementado, dicen sus responsables, "es un acuerdo con el banco Sabadell para respaldar, dar soporte y acompañar a los franquiciados de forma constante en estos momentos tan duros".
Todas estas medidas se tomaron para seguir apoyando un sector que, en este 2020, ha quedado patente que es clave en el día a día de las personas, ya que en los meses de confinamiento "todos hemos echado en falta a nuestro peluquero".
Desde Provalliance, se hace un llamamiento para que esto no caiga en el olvido y que la profesión mantenga el valor que le corresponde.