Autor de algunas de las colecciones más insignes de la peluquería española, caso de Gothic Revival, la cual le ha valido en 2017 el Premio Peluquero Español del Año Club Fígaro, Manuel Mon es no sólo un artista, es también un profesional con los pies en el suelo. De un tiempo a esta parte ocupando portada y contraportadas y renglones de interior exentos de punto y final, por lo que de seguido y genialidad tienen sus creaciones.
Seis veces consecutivas prenominado al mayor reconocimiento del sector en nuestro país, 2017 ha sido sin duda uno de sus años, en el que pisó la pasarela Fígaro para recibir, ante una platea entregada, el tan merecido Fígaro, al que suma otro conseguido en 2014, Mejor Colección de Vanguardia, con Adrómeda. Si aquélla, Andrómeda, ya encadenara suspiros, Gothic Revival desata irrefrenables pasiones.
Alabado por crítica y público, sus compañero de profesión lo adoran. Y es que querer a Manuel es muy fácil tanto como enamorarse de sus imágenes, lo cual ocurre al primer golpe de vista.
Con el cabello por bandera, Manuel dirige sus dos salones referentes en Oviedo. Peina y se codea con celebrities y personajes famosos que solicitan sus manos y pericia a la hora de tratar el cabello. Artesano confeso, ya dejó con la boca a abierta a más de uno, si no cientos, al proclamares Global Winner Style Master 2012 con una propuesta que destacaba del resto por sus volúmenes y altura en la que no existían accesorios ni horquillas para sujetar tales estructuras. Ahora, y con Gothic Revival, Manuel da un giro de tuerca más a la labor creativa, proyectándola hacia la alta costura. Un sueño hecho materia a través de perlas, alfileres, metal y cristales de Swarovsky y una estética Luis XIV en trajes dignos de museo. Así y tras todo esto, y más que reservamos en la pluma y el tintero para próximas ocasiones que vendrán, estamos seguros, Manuel Mon, acepta el reto, no nos cabía duda y participa de nuestro 'juego' de preguntas.
El secreto del éxito es la constancia en el trabajo y tener siempre la necesidad de mejora.
Beauty Market: Manuel, ¿qué se siente con el Fígaro más importante entre las manos? Manuel Mon: Sólo te puedo decir que esto es un sueño hecho realidad
B.M.: ¿Dónde lo tienes? M.M.: En uno de mis salones, en un sitio visible para todos los clientes y cualquiera que entre en él (sonríe).
B.M.: ¿Cuántas veces al día lo miras? M.M.: No muchas la verdad; al principio más pero con el tiempo me he acostumbrado a él.
B.M.: Manuel se levanta y lo primero que hace es... M.M.: Saludar a mis mascotas, mis perros, abrir la ventana y dar gracias a la vida por un día más.
B.M.: Lo mejor de tu día. M.M.: Sin ninguna duda, poder trabajar en lo que más me gusta, la peluquería de autor.
2018 va a ser un año de retos, nuevos proyectos y sueños.
B.M.: Lo peor. M.M.: La oscuridad; la noche no me gusta.
B.M.: Tu musa (cliente favorita). M.M.: Para mí todas son favoritas, pero la favorita por encima de todas es mi madre.
B.M.: Lo que no te gusta nada en la vida. M.M.: La falsedad y la mentira.
B.M.: De lo que disfrutas principalmente es... M.M.: De mi trabajo, de mis mascotas y de la naturaleza.
B.M.: Tu mayor virtud.
M.M.: Una de mis virtudes es la paciencia y también el saber escuchar.
Una de mis virtudes es la paciencia y también el saber escuchar.
B.M.: Algo inconfesable, (¡confiésalo!). M.M.: Es imposible de confesar (ríe divertido).
B.M.: Lo que no soportas en tu salón de peluquería. M.M.: El desorden y la suciedad.
B.M.: Lo que más te gusta de tu salón de peluquería. M.M.: Cuando un cliente te da las gracias por el trato recibido y el trabajo realizado.
B.M.: El título de una canción. M.M.: My heart will go on (de Céline Dion, identificamos rápidamente, "Mi corazón seguirá latiendo"...)
B.M.: El título de una colección de peluquería. M.M.: Nautilus (no podemos olvidarla, peripecia artística donde Manuel demostraba una vez más su capacidad para confeccionar alturas y volúmenes sin necesidad de accesorios ni horquillas).
B.M.: El secreto del éxito es... M.M.: La constancia en el trabajo y tener siempre la necesidad de mejora.
Lo que más me gusta de mi salón de peluquería es cuando un cliente te da las gracias por el trato recibido y el trabajo realizado.
B.M.: Un sueño logrado. M.M.: Ser quien soy y estar donde estoy.
B.M.: Otro por alcanzar.
M.M.: Que se reconozcan mis trabajos sin indicar mi nombre. (Nosotros ya lo hacemos, Manuel.)
B.M.: Te sientes eternamente agradecido a... M.M.: A todas las personas que están a mi lado.
B.M.: Qué no volverías a repetir. M.M.: Lo repetiría todo, incluso los errores cometidos porque te hacen mejorar.
B.M.: Y lo que harías una y otra vez. M.M.: Ser quien soy y dedicarme a lo que me dedico.
B.M.: 2018 va a ser... M.M.: Un año de retos, nuevos proyectos y sueños.
Y nosotros que lo veamos, Manuel...