Llega el 26 de diciembre o el 7 de enero y te encuentras entre las manos con dos camisas que no son de tu talla y un suéter que... ¡Bueno, mejor ni decir lo que pienso!
Ahora toca ir a cambiar los regalos que o no nos han gustado o nos nos valen, o que simplemente no necesitamos en post de otros más perentorios o prácticos.
¡Qué levante la mano a quien no le haya ocurrido esto todas las navidades! (Si no lo haces... serías un bicho raro).
Qué mejor entonces que echar mano y disfrutar de una tarjeta regalo.
Las tarjetas regalo están cada vez más presentes en las cartas a los Reyes Magos y a Papá Noel le han quitado un gran peso de encima, bueno a él en realidad no, sino a su trineo y sus renos que son los que tiran de las cajas con decenas de presentes que aunque, con ilusión, a veces son, y en equidad, tan inservibles como el número de kilos que suman. ¡Y qué no decir de los tres sedientes camellos de sus Majestades de Oriente! Siguiendo a la estrella con las alforjas llenas de decenas, cientos de paquetes...
El otro día me contaba una amiga: "Después de la aventura infructuosa de encontrar el regalo perfecto, recurrí a las tarjetas de regalo en efectivo para todos. No ocupan espacio y no necesitan embalaje, solo un pequeño sobre para proporcionar felicidad".
Pues va a ser verdad, pensé.
Y es que no solo facilitan la vida de quien regala sino que pueden multiplicar los beneficios de sus artífices.
Así que si eres de esos profesionales peluqueros que ya está pensando en hacer sus tarjetas regalo para esta Navidad, toma nota. Hazlo bien y disfruta de todo lo positivo que aportan a ti, tu cliente y tu negocio.
1. Especifica el valor: indica claramente si la tarjeta de regalo se refiere a un valor concreto en euros o es específica para un servicio (por ejemplo, corte de cabello, peinado, manicura o tratamiento facial). Proporciona detalles explícitos sobre los servicios cubiertos.
Garantiza un proceso simple y directo para canjear tarjetas regalo, incluida información sobre horarios, días y canjes de días festivos.2. Establece fechas de vencimiento: indica claramente las fechas de emisión y vencimiento de los certificados de regalo, asegurando el cumplimiento de las leyes locales.
3. Esboza las políticas de reembolso y transferencia: articula las políticas relativas a los reembolsos y la transferibilidad, haciendo que esta información sea fácilmente accesible para los compradores y destinatarios.
4. Permitir el canje flexible: si es posible, habilita el canje de tarjetas regalo para varios servicios o productos, brindando a los destinatarios más opciones.
5. Agiliza los procesos de canje: garantiza un proceso simple y directo para canjear tarjetas regalo, incluida información sobre horarios, días y canjes de días festivos.
6. Educa a los clientes: informe a los clientes sobre la disponibilidad, compra y canje de tarjetas regalo. Exhibe un certificado de muestra en un lugar destacado de tu salón.
7. Diseño y marca: las tarjetas mal diseñadas o ejecutados pueden afectar negativamente a la percepción de la marca del salón, afectando a la experiencia general del cliente. Invierte en tarjetas atractivas y bien diseñadas que reflejen la marca de tu salón. Un diseño visualmente atractivo puede realzar el encanto del regalo.
8. Promociona de manera efectiva: comercializa y promueve activamente los certificados de regalo, especialmente durante los días festivos u ocasiones especiales. Utiliza las redes sociales, tu sitio web y los medios de comunicación profesionales, así como tu propio salón para maximizar la visibilidad.
A partir de aquí... ¡A disfrutar! Las tarjetas regalo te convencerán de que son uno de los mejores y más convincentes regalos de Navidad.