Aunque parezca raro, la melena también sufre depresión postvacacional. Las largas horas de exposición solar, el contacto con el salitre, la arena, el cloro, el viento y la humedad hacen que el cabello se deteriore y sufra las consecuencias del verano. Los rayos solares penetran en las cutículas, dañan el cuero cabelludo y debilitan los folículos pilosos, dando lugar a una deshidratación inmediata del pelo. El salitre también es dañino: las partículas de sal actúan como cristales que atraen los rayos del sol. Además, la arena, y sus minerales marinos, oxida y deshidrata, de forma progresiva el cabello. Por último, el cloro es el gran enemigo de las melenas decoloradas. Por un lado, altera su coloración; por el otro, actúa de manera negativa sobre el cabello no tratado.
Cinco problemas capilares y sus tratamientos
Puntas abiertas, encrespamiento, deshidratación, falta de brillo y color. Cinco problemas que van de la mano tras el verano y para los que Alma Luzón propone una serie de tratamientos capilares.
» PUNTAS ABIERTAS. Uno de los problemas capilares más comunes que deslucen la melena y afecta a todo tipo de cabellos. Las puntas se abren cuando la capa protectora de la hebra se desgasta y la estructura interna del pelo queda expuesta. Ello deteriora y deshidrata las puntas abiertas. Tras el verano, este problema se acentúa a raíz de diversos factores externos como el sol, el salitre o el cloro.
Solución: El láser Therapy es un tratamiento revolucionario que combina la acción de un láser de baja intensidad con un concentrado de activos que nutre, repara y refuerza el cabello de forma inmediata. Las puntas abiertas y el pelo dañado se reconstruyen gracias a una fórmula combinada de aceites, proteínas, antioxidantes y oligoelementos minerales en una concentración superior al 50%. El láser de baja intensidad facilita la penetración de los principios activos en las zonas deterioradas del pelo. El tratamiento dura cerca de 30 minutos.
» ENCRESPAMIENTO. La causa principal del encrespamiento es la falta de hidratación. La deshidratación de la melena quiebra las cutículas y contribuye a la desaparición de la queratina natural que protege las fibras del cabello. La melena se encrespa porque busca la humedad ambiental para hidratarse. Además, los factores externos del verano aumentan el nivel de deshidratación y favorecen su encrespamiento.
Solución: El Botox Capilar ofrece una hidratación profunda que regenera el cabello desde la primera sesión. Gracias a su alto contenido en vitaminas, las mismas que contiene el pelo de manera natural, se recupera la salud y elimina el encrespamiento de la melena. El tratamiento dura casi 20 minutos.
El tratamiento con Células Madre Vegetales repara la hebra capilar, mejora la función del folículo piloso y aporta suavidad y brillo, además de una regeneración inmediata. Las células madre vegetales penetran en el cuero cabelludo para regenerarlo de dentro hacia fuera. Gracias a su compatibilidad con las células madre dérmicas se consigue recuperar la melena. El tratamiento dura casi 15 minutos.
» DESHIDRATACIÓN. El pelo necesita del 15 al 17% de agua para mantenerse hidratado. Durante el verano, el cabello se deshidrata por los factores externos típicos de la temporada. La capa hidrolipídica se daña y desaparece, la melena se cuartea y aparecen escamas en la capa cuticular.
Solución: La Cauterización es un tratamiento que repara y protege el pelo deshidratado. En este caso, se busca la regeneración capilar en vez de su alisado. También se ayuda a sellar la cutícula, se elimina la sequedad y el encrespamiento. Es un procedimiento similar al botox capilar pero aplicando una plancha de calor para que penetre en profundidad en el cabello. El tratamiento dura 45 minutos.
» FALTA DE BRILLO. No importa si el pelo es natural, con mechas o teñido. En verano las melenas pierden brillo y se vuelven mates. La falta de brillo origina las puntas abiertas. Cuando se abren, el pelo se reseca y se vuelve quebradizo. La consecuencia más inmediata es que el cabello pierde su brillo natural quedándose mate, apagado y opaco.
Solución: El ácido hialurónico, combinado con el ácido glicoxílico y un conjunto de aminoácidos, aporta brillo y suavidad al cabello. Este tratamiento no contiene queratina, aunque se consigue un efecto mágico. Se elimina el encrespamiento y se gana brillo, textura sedosa y efecto alisado. Para ello se emplean componentes naturales, libres de formol y amoníaco. El tratamiento dura casi dos horas.
» COLOR. La melanina, responsable del color, se deteriora y altera en los meses de verano. Ello origina una decoloración leve. El sol blanquea los pigmentos del pelo, los decolora y le resta brillo a la melena. Por su parte, el cloro proporciona un reflejo verdoso al cabello rubio. El pelo teñido es más frágil a la exposición solar. La coloración sin los cuidados apropiados vuelve el cabello más débil y poroso.
Solución: Se sugiere un baño de brillo para cabellos no teñidos o baño de color para las melenas tratadas con tintes. Los baños de color ayudan a revitalizar el color perdido y mantienen el pelo con un aspecto sano y natural. El tratamiento se repasa cuatro o seis semanas después, en función del crecimiento de las raíces. El tratamiento dura casi 45 minutos.