Seguro que tienes uno o más de uno sobre tus estantes y en tu salón.
El champú azul es el nuevo 'must' para rubias. ¿Por qué? Pues por una razón muy sencilla a la vez que poderosa. El denominado 'Champú Azul' no es más ni menos que un matizador que devuelve el color original y el brillo y luminosidad cuando estos se han tornado amarillentos o anaranjados.
¿Cuántas veces has oído la expresión 'rubio pollo' o 'rubia de bote'?
Con el champú azul, los rubios pollo y de bote tienen los días contados.
Rubios perfectos
Los expertos de YöY Cosmetics nos desvelan las claves para el correcto uso del champú azul y que de este modo, el rubio sea siempre perfecto:
¿Cómo actúa el champú azul sobre el pelo rubio?
El champú azul devuelve el color original a la melena y matiza esas tonalidades que tiran al naranja o amarillo. El pelo tiende a esos colores por varios factores: el efecto de los químicos de lavado sobre el tinte, la exposición al sol, los hábitos de higiene capilar o incluso la salinidad del agua.
¿Para qué sirve realmente el champú azul?
Para matizar el pelo que se ha teñido de rubio o las canas que se han vuelto amarillentas. También para neutralizar o matizar otros tonos de cabellos teñidos e incluso para eliminar el color naranja de un pelo decolorado.
Cinco errores que debes evitar
Los errores más frecuentes en el uso del champú azul son:
1. Un lavado no es suficiente.
El proceso puede tardar varios lavados hasta lograr el color deseado. Con un solo lavado difícilmente se tienen los resultados deseados por lo que hay que insistir un poco más hasta dar con el rubio perfecto.
2. Abusar de su uso.
No se trata de un champú de uso diario sino de uso ocasional. Aconseja a tu clienta usarlo en casa una vez a la semana porque abusar de ello puede resecar en exceso la melena. Además, se corre el riesgo de que los pigmentos azulados y violetas del champú penetren en tu cabello de manera indeseada alterando mucho el color del pelo.
El champú azul devuelve el color original a la melena y matiza esas tonalidades que tiran al naranja o amarillo. El pelo tiende a esos colores por varios factores: el efecto de los químicos de lavado sobre el tinte, la exposición al sol, los hábitos de higiene capilar o incluso la salinidad del agua.
3. Frotar el cabello con el champú azul.
Usa el champú azul en el segundo lavado, el primero hazlo con el champú habitual. Aplica una generosa capa pero no frotes, masajea suavemente el champú y déjalo actuar de 5 a 10 minutos.
4. No utilizar guantes.
Ya sabes de lo que hablamos, el color azul se queda en el lavabo, incluso en tu piel, uñas y manos. Por ello, la mejor opción es aplicarlo con guantes.
5. No hidratar bien el cabello.
Tras el lavado con el champú azul asegúrate de hidratar bien el cabello ya que este tipo de champús tienden a resecar mucho la melena dándole un aspecto áspero y apagado.
Producto recomendado
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