Trabajadora, perfeccionista, humilde y avispada. Así podríamos definir a Carla Alonso. Una profesional de la peluquería que forjó su carrera en el salón de Jorge Rubín de Gran Vía de Vigo. Desde sus inicios, tuvo muy claro que lo suyo era pura vocación y entrega, que iba a empaparse de aprendizaje y a luchar para seguir creciendo.
A lo largo de los años, ha demostrado tener un talante especial, una intuición innata. Apasionada del color y el diagnóstico del cabello, sabe perfectamente que cada cliente es un mundo y que los tiempos evolucionan a pasos agigantados. Por eso cree absolutamente necesario adaptarse constantemente para lograr la excelencia. Conoce de primera mano las exigencias y retos a los que se enfrentan diariamente los profesionales peluqueros. Es por ello, que desde hace casi tres años forma parte del equipo educativo de la Advanced Academy de I.C.O.N., faceta que compagina con su labor comercial con la firma.
Beauty Market se hace eco de sus inquietudes y experiencias, de su trabajo diario con los profesionales del sector, poniendo en relieve el orgullo que siente por pertenecer al universo I.C.O.N., precisamente por el valor diferencial que puede ofrecer a otros compañeros de profesión.
Mi reto personal es mejorar, aprender día a día y no estancarme. Si echo la vista atrás, veo todo lo que hemos evolucionado desde que comenzamos con la Advanced Academy.
BEAUTY MARKET: ¿Cómo describirías tu trayectoria profesional hasta llegar a tu faceta de formadora?
CARLA ALONSO: Si lo tuviera que describir con una palabra, sería crecimiento. Cuando me formé como peluquera, hice las prácticas en Jorge Rubín. Allí vi que podía aprender y formarme continuamente. Se me presentó la oportunidad de compaginar trabajar en la Advanced Academy la mitad de la semana y en la peluquería los días restantes. Un año y medio después, dejé la peluquería y me incorporé al equipo educativo y comercial a tiempo completo, compaginando la formación en la academia con las visitas a nuestros clientes en sus respectivos salones.
B.M.: ¿Qué es lo que te resulta más estimulante de las formaciones I.C.O.N.?
C.A.: Que son formaciones vivas, en las que gracias al formato, siempre trabajamos cosas diferentes. Hay que tener en cuenta que cada cabello es distinto y por lo tanto tiene un diagnóstico específico. Al final, trabajamos con modelos y es ahí donde vemos la realidad con la que se encuentran los peluqueros hoy en día. Nuestro objetivo es ofrecerles las herramientas necesarias para poder enfrentarse a cualquier reto.
Hay que tener en cuenta que cada cabello es distinto y por lo tanto tiene un diagnóstico específico. Al final, trabajamos con modelos y es ahí donde vemos la realidad con la que se encuentran los peluqueros hoy en día.
B.M.: ¿Por qué te gusta tanto el segmento del color y el diagnóstico del cabello?
C.A.: Porque cuando transformas un cabello tratándolo en profundidad, con todo lo que necesita, es increíble. Si a eso le añades conseguir un color luminoso, con dimensión y calidad, tienes la combinación perfecta. Y es algo tan visual que habla por sí solo.
B.M.: ¿Qué recibes de los profesionales de la Advanced Academy?
C.A.: Siempre aprendo de ellos. Al fin y al cabo, son grandes peluqueros con años de experiencia y un amplio conocimiento. Que confíen en ti para dejarse guiar, que estén abiertos a tu enseñanza y tener la oportunidad de demostrarles cómo pueden conseguir lo que buscan, es muy gratificante.
B.M.: ¿Y de tus compañeros en la academia?
C.A.: Considero que somos un equipo muy completo. Cada una tiene un punto fuerte en el que destaca y ahí es donde, tanto Jorge como Vanesa, nos enseñan cómo potenciarlos y mejorarlos aún más. ¡Así que yo intento absorber todo lo que puedo de todo el equipo!
Los clientes no buscan peinados duraderos, ni colores básicos, porque eso ya muchos lo consiguen en su casa. Llegan a los salones con franjas de color y necesitando correcciones. Eso es precisamente, a demás de otras cosas, en lo que trabajamos en la academia.
B.M.: ¿Cuáles son las principales preocupaciones de los peluqueros hoy en día?, ¿qué retos os plantean los profesionales?
C.A.: Diría que la peluquería está cambiando mucho respecto a años atrás. Los clientes no buscan peinados duraderos, ni colores básicos, porque eso ya muchos lo consiguen en su casa. Llegan a los salones con franjas de color y necesitando correcciones. Eso es precisamente, a demás de otras cosas, en lo que trabajamos en la academia. Les damos pautas para enfrentarse a esas realidades.
B.M.: Los productos I.C.O.N. destacan por su increíble calidad y por todos los beneficios que aportan al cabello, ¿cómo hacéis para sumar continuas innovaciones?
C.A.: Pues es todo gracias a Chiara. Ella no sólo crea los productos, sino que trabaja con ellos continuamente para conseguir mejores resultados. Incluso con productos que llevan años en el mercado. Además de eso, tenemos entrenamientos continuos para formarnos como equipo y poder transmitir todas esas actualizaciones a nuestros clientes.
La peluquería está en un momento de personalización, ya que los clientes demandan profesionalidad y un servicio impecable.
B.M.: En tu opinión, ¿hacia dónde evoluciona el sector de la peluquería profesional?
C.A.: La peluquería está en un momento de personalización, ya que los clientes demandan profesionalidad y un servicio impecable.
B.M.: ¿Cuál es el valor fundamental que inculcáis a los peluqueros que confían en la academia?
C.A.: Siempre el cuidado integral del cabello. Aún centrándonos en el color, les demostramos cómo la parte tratante de cualquiera de nuestras coloraciones actúa en cada cabello. De esta manera, así como nosotros se lo demostramos a ellos, los peluqueros podrán demostrárselo a sus clientes.
B.M.: ¿Tienes algún nuevo reto profesional en mente para el futuro?
C.A.: Mi reto personal es mejorar, aprender día a día y no estancarme. Si echo la vista atrás, veo todo lo que hemos evolucionado desde que comenzamos con la Advanced Academy. Por otro lado, soy una persona inconformista y muy exigente, así que seguiré formándome y aprendiendo sin ponerme límites.