BM Peluquería > Entrevistas

Mira que me gusta hablar con este hombre, Álvaro Calvo, 'The Barber' y ya ni te digo cuando se trata de verlo en acción, haciendo de la ciencia barbera norte y condecoración en actuaciones y formaciones punteras que bien merecen un cum laude, de tan bien hechas, precisas, técnicas y creativas que son.
Álvaro, Álvaro Calvo, Álvaro the Barber dirige su barbería en Logroño. Desde allí ha sido capaz de exportar su visión barbera a otros lugares, cruzando fronteras. En la palma de sus manos y entre sus dedos lleva sangre, pasión y arena, no lo puede esconder. Lo suyo con la barbería y el cabello, barbas y bigotes masculinos es un idilio que estaba escrito, en uno de sus genes, el de peluquero, al cual se arrimaba y en el que se cobijaba y encontraba sombra a los pies de su padre, de quien aprendiera.

Recientemente lanzaba colección, Lord, de la que ya dimos cuenta en nuestras páginas. Por ese motivo y otros muchos, razones de peso todas ellas, que lo autorizan a ser voz barbera, hoy nos complace poder charlar de tú a tú, con Álvaro, no lo dudéis, insignia barbera.

Beauty Market: ¿Qué es Lord?
Álvaro Calvo: Mi última propuesta en moda masculina, en la que he tratado de coger los conceptos estéticos actuales de la peluquería masculina y llevarlos a una colección dándoles un toque más creativo y llamativo.

B.M.: ¿En qué momento te encuentras Álvaro?
A.C.: Fluyendo... (Ríe, con fuerza, de hecho, su risa es consustancial a él mismo y su gesto, su imagen, su forma de vivir, de situarse frente a la vida). No, en serio, después de unos años trabajando a tope en las diferentes facetas en las que desarrollo mi profesión: mi barbería, las formaciones, eventos varios..., me encuentro en un momento, sí, de mucho trabajo, pero más reposado, analítico y selectivo, en el que mi objetivo es disfrutar mucho de lo que hago dedicándole más tiempo a menos cosas.

B.M.: ¿Pensaste por un segundo llegar hasta aquí?
A.C.: La vida te da sorpresas, dice la canción. No, jamás lo pensé, sobre todo porque no soy de marcarme objetivos y menos a largo plazo. Me he criado en una familia de trabajadores natos en la que los resultados llegan como consecuencia del mismo, como resultado de la profesionalidad, no de buscar metas.

B.M.: ¿Y cuál es el momento barbero que vive nuestro país?
A.C.: ¡Estupendo! Nos enfrentamos al cliente más inquieto y exigente en cuestión de estética y belleza que hemos conocido nunca, así que la demanda de los servicios de peluquería masculina y la barbería son brutales.

B.M.: ¿Algo que envidiar al resto del mundo?
A.C.: Todo lo que tenemos que envidiar al resto del mundo en nuestro sector no es culpa de la idiosincrasia del sector en sí, sino del estado y coyuntura del país en cuestión, como por ejemplo la situación económica. Algo que seguramente afecta a todos los sectores, no solo al nuestro.

B.M.: ¿La peluquería es...?
A.C.: La dedicación a dar forma, a cambiar, a embellecer el cabello de las personas. El cabello que, junto con el rostro, es nuestra 'tarjeta de presentación' ante los demás. Un gran oficio lleno de apasionados profesionales que son capaces de cambiar imágenes y estados de ánimo.

B.M.: ¿Y la barbería, qué es?
A.C.: La parte masculina de la peluquería se dedica al cabello y la barba. Así de sencillo, así de concreto, pero con un amplísimo mundo de posibilidades por delante.

B.M.: ¿En qué se distingue tu establecimiento del resto?
A.C.: Eso es difícil de responder por mi parte (exclama y sonríe). Sería una pregunta para mis clientes (y hace un gesto divertido y un guiño).

B.M.: Hablando de clientes, la pieza, la clave, ¿cómo trata Álvaro The Barber al cliente?
A.C.: Como me gustaría que me trataran a mí mismo si fuera a una barbería. Un espacio en el que haya máxima dedicación al apartado técnico, a la búsqueda del detalle en cada trabajo, y que a la vez sea un lugar distendido, ese lugar socializante que siempre ha sido la barbería, en el que entre y pase un rato agradable con mis barberos y su clientela.

B.M.: Lo mejor de ser barbero es...
A.C.: Agradar al cliente con el cuidado de su imagen y sentir su satisfacción. El factor creativo, el crecimiento técnico, y la posibilidad de conocer a un montón de clientes con los que en muchos casos acabas compartiendo media vida y pasan a ser grandes amigos.

B.M.: Otra de tus facetas es la formativa, donde despuntas junto a otros grandes. ¿Cómo son las formaciones en las que participas? ¿Qué pretendes transmitir?
A.C.: Mis formaciones trato de enfocarlas sobre todo al apartado más técnico, a dejar bien claro cómo ejecutar trabajos con un método que sea fiable y útil a los peluqueros. Por supuesto, también me gusta hablar de tendencias y diversos temas que nos interesan a los profesionales del sector.

B.M.: ¿En qué se distingue una buena formación de otra que no lo es?
A.C.: Una formación ha de ser para mí, ante todo, útil. Que el asistente salga de ella con la sensación de que lo visto o aprendido le va a hacer ser mejor en la materia que se ha tocado en esa formación.

B.M.: Formadores, crecieron como setas en un momento dado. ¿Qué le sobra y de qué carece la formación en nuestro país?
A.C.: Para esto yo creo en la ley de la oferta y la demanda, así que yo no soy quién para decir quién o qué sobra. Si alguien o algo permanece en el tiempo es que hay mucha gente para la cual es válido o bueno. Lo demás desaparece.

B.M.: ¿Por qué la peluquería masculina y no la unisex o la femenina?
A.C.: Era el lugar donde me sentía a gusto cuando empecé de muy joven con mi padre. En su peluquería, que era unisex, yo me encontraba bien en la zona de caballeros. Así que, en eso estoy desde entonces.

B.M.: Lo que siempre has estado tentado de hacer pero todavía no has hecho.
A.C.: Aprender a tocar la guitarra. Algún día. (Se desmarca y pienso, pues le pega, le pega mucho,).

B.M.: Lo que no volverías a hacer nunca más.
A.C.: Abrir un negocio a la edad que lo hice, con 23 años. A esa edad hay que estar aprendiendo con los mejores, no pagando créditos.

B.M.: Sueñas con...
A.C.: Envejecer con los míos a mi lado.

B.M.: Empezábamos esta entrevista con Lord, tu última colección masculina, ¿a qué se debe tu incursión en el mundo de las colecciones de peluquería?
A.C.: Porque las colecciones son una bonita manera de dar rienda suelta a la creatividad sin las ataduras que te impone la peluquería del día a día.

B.M.: ¿Cuál es el objetivo que persigue Álvaro al hacerlas?
A.C.: Pretendo contar de alguna manera el momento en el que me encuentro. Tampoco es que piense mucho en el recorrido de la colección, para un montón de cosas soy una persona impulsiva y me guío por corazonadas que ejecuto sin mucho análisis. Lanzo mis colecciones para disfrutarlas en ese momento.

B.M.: ¿En qué trabajas ahora?
A.C.: Pues aparte de seguir con lo de siempre (y vuelve a sonar su risa). Este año he lanzado mi nuevo proyecto formativo con la gestión de mi imprescindible Rosana Collado, Grupo macomaco, que consiste en traer las formaciones a mi barbería. Es una idea que llevaba rondando hace tiempo y que me hace una especial ilusión ya que tengo así la posibilidad de invitar a grandes profesionales a mi casa, al lugar donde me siento como pez en el agua, mi barbería. Es algo súperíntimo y personalizado ya que son dos días de formación (domingo y lunes) para grupos reducidos de tres personas. Hace tan sólo unos días he hecho la primera y me ha encantado la intensidad de la formación y el ambiente que se ha creado con los asistentes. Además, estoy feliz porque ha tenido una acogida brutal, ya tenemos cerradas algunas cuantas más incluso para el año que viene.

B.M.: Lo que te gustaría para la peluquería en general es...
A.C.: La peluquería española está en un momentazo a nivel internacional, con un montón de profesionales subiendo a los mejores escenarios, ocupando portadas y recibiendo premios en medio mundo. A nivel interno y empresarial lo que hace falta es que, como país, todo mejore. Si a la gente le va bien, a nosotros como peluqueros también.

B.M.: El futuro de la barbería, lo ves...
A.C.: Espléndido. Como te decía al principio, mientras tengamos a un hombre tan dispuesto a cuidar su imagen, lo cual es la razón por la que gozamos de buena salud, el futuro es bueno. Además, veo a unos profesionales súperinquietos así que, a seguir así.

B.M.: Cuéntanos el secreto de tu éxito, Álvaro.
A.C.: Ni idea, sinceramente. Pero sí te digo lo que hago cada día, que es lo siguiente: trabajo mucho, eso me lo inculcaron en casa. Trabajo en algo que me gusta, y con lo que me he apasionado intentando mejorar siempre. También intento hacer las cosas a mi manera, consecuentemente, comunico todo mi trabajo como me sale de dentro, sin muchos filtros y sin muchas pretensiones.

B.M.: Entonces, un día habitual en la vida de 'Lord' Álvaro Calvo, 'The Barber', es...
A.C.: Pues mira, también me cuido y cuido a su vez, gimnasio, barbería, redes sociales y medios, como ahora contigo; comida en casa con mis niños y mi chica, más barbería, cervecita con amigos, cena... ¡Y tan feliz oye!

Y es que no nos extraña, lo lleva escrito, Álvaro Calvo, The Barber es un hombre bueno.