El cabello estresado, dañado por el sol o el uso de utensilios de calor -planchas y secadores- se regenera y recupera su brillo y vitalidad gracias al aceite de abisinia. Éste proviene de las semillas de la Cambre Abyssinica, una planta sudafricana cultivada en puntos del Mediterráneo. De esta planta oleaginosa se extrae un aceite vegetal 100% natural, utilizado durante siglos en el sur de Egipto y la Etiopía actual, para tratar la piel y el cabello. Se dice que la reina de Sheba, personaje legendario que supuestamente gobernaba el reino de Saba localizado en los territorios actuales de Etiopía y Yemen, se servía de este elixir de textura ligera y propiedades nutritivas.
Este aceite vegetal, biodegradable y libre de aditivos, es prácticamente inoloro y resiste las altas temperaturas (se puede calentar a 110 °C). Además, posee un contenido rico en ácidos grasos omega 6 y 9 que nutren, suavizan e hidratan el cabello más estropeado. El cuerpo humano no produce el ácido graso omega 6, por lo que se debe administrar e ingerir a través de medios externos. Esta grasa poliinsaturada se emplea en casos de caída del cabello relacionada con la falta de riego sanguíneo en el folículo piloso. Por el contrario, el organismo sí produce omega 9, un antiinflamatorio natural que protege y cuida la piel.
El aceite de abisinia regenera y devuelve al pelo su aspecto saludable. Con su uso, se suaviza y recupera la fibra capilar sin ensuciar el cabello. Además, el pelo, antes castigado, se vuelve manejable y fácil de peinar.
Un tratamiento de choque
Natura Plant Intensa, de la brasileña Natura Cosméticos, es una línea para cabello extremadamente dañado. Este ritual de regeneración capilar se presenta con una fórmula innovadora a base de óleo de abisinia. Para la dermatóloga Hilda Herrera, de Natura Cosméticos, los ácidos grasos omega 6 y 9, junto con los fitoesteroles presentes en el aceite de abisinia, reconstruyen y nutren en profundidad todas las capas de la fibra capilar. Estas sustancias representan un tratamiento de choque para cabellos dañados. El aceite no confiere un aspecto aplastado, otra de sus ventajas. Su textura ligera proporciona un look natural, con movimiento, al cabello.
Se trata de una terapia capilar regenerativa profesional que se inicia en el salón y se puede mantener en casa. La frecuencia aconsejada es de dos veces por semana, intercalada con productos de uso habitual.