¿Cuáles son las mechas del invierno?
Recurrimos a dos especialistas para averiguarlo.
Sonia Atanes, directora de formación e I+D en Sonia Atanes Hair Beauty
» Chunky. Son mechones frontales que enmarcan el rostro, rectos y muy definidos donde se utilizan dos tonos para destacar el claroscuro de la melena: “Pueden lucirse en todos los tonos, aportando mucha luminosidad a la melena. Una vez decolorado el cabello, también se puede matizar con el color fantasía semipermanente que más nos guste, como un rosa, un morado o un verde”.
» Babylights. Consisten en aclarar de forma muy natural y sutil el pelo, manteniendo el color en todo momento: “Son perfectas para un efecto rubio natural, por medio de mechas delicadas que aportan luminosidad a la melena y un punto de dulzura al rostro”.
Paul Tudor, director y primer estilista del salón David Künzle Fuencarral
» Shatush. Entre las mechas que mejor funcionan en invierno están las shatush, con las que se consigue un efecto mucho más natural que con las balayage, destacando que las raíces se mantienen más oscuras, mientras que el resto del cabello se aclara poco a poco obteniendo reflejos que no quedan forzados. Aunque pueda parecer una técnica sencilla, no lo es tanto: “El problema está en que tratamos de dar una apariencia natural al cabello con reflejos y un brillo propio donde no se aprecia la coloración por ningún lado, ya que las mechas no afectan la raíz una vez empieza a crecer el pelo. Son perfectas para aquellas mujeres hartas del tinte y que buscan verse guapas sin destacar aparentemente, con raíces más oscuras y puntas algo más claras, un look natural que contrarresta con muchas de las mechas que solemos ver por la calle a menudo”.
"Las mechas 'melting' son un tono difícil de detectar por su forma tan natural, muy apropiado para todo tipo de bases naturales y para personas que no quieren un cambio muy radical", explica Paul Tudor.» Melting. El término melt o melting significa algo así como “derretido”, de ahí surge la técnica del melting blonde, la transición de un tono oscuro a otro más claro a lo largo de todo el cabello, difuminándose de manera sutil para lograr un degradado que no se note: “Es un tono difícil de detectar por su forma tan natural, muy apropiado para todo tipo de bases naturales y para personas que no quieren un cambio muy radical. Es preferible que se haga con pincel ya que no se buscan tonos muy potentes, pero sí un aclarado más global. El resultado es un reflejo a lo largo de la melena que se pierde en dicha melena”.