A veces descubrimos algún caso de negocios que han despegado, por casualidad, gracias al boca a boca generado a través de las redes sociales. Un ejemplo claro es el de la venezolana Mercedes Zerbino, que utilizó una página de Facebook para mostrar los peinados que creaba por afición para sus amigas, y se volvió tan popular que ha conseguido crear un negocio muy rentable, con reservas de varios meses de antelación. Pero este caso no es tan fruto de la casualidad como parece: sabiendo utilizar las herramientas virtuales, lo que antiguamente se quedaba en una transmisión de la información a nivel local, puede llegar a ser de nivel nacional e incluso internacional de una manera mucho más rápida.

Según un estudio de IAB Spain, en 2013 hasta un 79% de los españoles entre 18 y 55 años utilizaban las redes sociales, comparados con el 51% que lo hacía en 2009. Además, un 48,2% de los internautas navegan a diario por medios de comunicación digitales, y más del 40% también entran en portales de compra on-line a diario o al menos una vez por semana.

Este cambio en los hábitos de los consumidores afecta también a la manera de hacer negocios, que debe adaptar sus estrategias para llegar a este sector a través de su medio preferido.

Grandes empresas como L'Oréal ya se han puesto a ello: la firma ha conseguido aumentar en un 20% sus ventas a través de web gracias al 12% extra de presupuesto que destinó a publicidad en medios digitales. Internet es una plataforma publicitaria que cobra cada día más importancia, por lo que es importante dejar los miedos y el desconocimiento atrás para empezar a sacarle provecho.

Un negocio con éxito empieza, obviamente, con un trabajo bien hecho: una buena técnica de corte, un buen color, una buena atención al cliente. Pero si ese trabajo no es visto y reconocido, no sirve de nada. Existe un dicho popular que reza "si no estás en Internet, no existes", algo que cada día se vuelve más cierto, así que, como empresario, es esencial para tu éxito entrar a formar parte de este mundo virtual y dominarlo en tu beneficio.