El Venus Freeze es un equipo médico de última generación que combina dos tecnologías: Radiofrecuencia Multipolar + Pulsos magnéticos. Está indicado en procedimientos faciales y corporales, ofreciendo resultados contundentes en reducción de grasa localizada, tensado/reafirmación de la piel, reducción de la celulitis y modelado corporal.
¿Cuál es el paciente ideal para el tratamiento?
El Venus Freeze® es recomendado en hombres y mujeres que quieran mejorar la textura y elasticidad de la piel, reafirmar la piel (facial y corporal), prevenir y reducir la celulitis, modelar el contorno corporal o como un tratamiento facial antiaging.
¿En qué consiste la tecnología del Venus Freeze®?
La tecnología que utiliza el Venus Freeze® trata al cuerpo desde el interior y el exterior al mismo tiempo, mediante la combinación de Pulsos Magnéticos + Radiofrecuencia Multipolar (MP2: siglas de Multi Polar Magnetic Pulses).
A través de su aplicación sobre la zona a tratar crea una matriz de energía capaz de estimular la angiogénesis y la reestructuración/regeneración del colágeno y elastina; esto se traduce en una piel más tensa, combatiendo la flacidez.
Por otro lado, esta tecnología permite actuar conjuntamente en la profundidad del tejido, generando una disminución en el tamaño de las células grasas mediante el incremento en la ruptura de triglicéridos (Lipólisis). La distribución uniforme de calor minimiza efectos secundarios y elimina completamente la necesidad de enfriamiento de la piel.
Freeze (MP)2 esta indicado para tratamientos antiage y corporales. Esta novedosa tecnología consigue resultados espectaculares en reducción de grasa localizada, volumen, contorno y eliminación de cúmulos de celulitis.
La combinación de los pulsos magnéticos y la radiofrecuencia multipolar da como resultado un tratamiento no invasivo con muy buenos resultados y que se diferencia de las otras tecnologías por la comodidad y el placer que siente el paciente durante el tratamiento.
Radiofrecuencia multipolar + pulsos magnéticos para reducir el volumen corporal
El campo magnético es reconocido por la medicina del siglo XXI como una importante y exitosa modalidad aprobada por la FDA para el tratamiento de una gran variedad de desordenes clínicos como dolor, depresión, migrañas, falta de cartílago y fractura ósea.
Sus cabezales redondeados forman una matriz que genera un campo de energía que penetra en las diferentes capas de la piel hasta niveles subcutáneos. Esta penetración simultánea aumenta los efectos biológicos de la lipólisis, la angiogénesis y la regeneración de las fibras del tejido conjuntivo.