Caviar, carboxiterapia, células madre o el peeling glicólico antimanchas, son algunos de los tratamientos combinados que la doctora Elena Jiménez ofrece en su clínica madrileña para recuperar la salud de la piel y prepararla para el invierno.
La aplicación de ácido hialurónico, combinado con un tratamiento de caviar, es una buena opción para rehidratar la piel y devolverle su tersura, elasticidad y luminosidad. Dirigido a pieles cansadas, el ácido hialurónico rellena los depósitos de humedad de la piel durante el día, siendo altamente eficaz para la eliminación de las arrugas de expresión. Por su parte, el tratamiento de caviar actúa sobre las pieles envejecidas, especialmente por el sol. Tras varias sesiones, tendrás como resultado una piel hidratada, flexible, voluminosa, sana y sin arrugas.
Si te planteas un tratamiento más a largo plazo, es recomendable una combinación de radiofrecuencia facial con carboxiterapia. Con la radiofrecuencia facial se aplica energía a través de la zona profunda de la dermis, aumentando su temperatura y generando así una acción directa sobre las fibras de colágeno, lo que ayuda a remodelar los tejidos de la piel. Es ideal para corregir una ligera flacidez en la piel de la cara y cuello, así como en las zonas alrededor de los ojos y labios. El tratamiento, que consta de cinco sesiones espaciadas según el ciclo vital del colágeno (28 días), se complementa con mesoterapia y un relleno final. Por su parte, la carboxiterapia son microinyecciones de CO2 que se aplican en las zonas localizadas con flacidez, produciendo un efecto de tensado y activación celular, además de corregir las arrugas. Este tratamiento se aplicará durante 10 sesiones, tras las que se evalúa el rostro para valorar la aplicación de otro tratamiento.
En el área de estética facial también destaca el tratamiento con células madre, que favorece los mecanismos naturales para la regeneración de la piel y frena su envejecimiento prematuro. Destinado tanto a pieles jóvenes como maduras, sus beneficios principales son la protección del ADN, su gran efecto antiarrugas y antioxidante, la revitalización de las células madre de la piel y la activación de la nueva formación de colágeno. Otro tratamiento para recuperarse de los excesos de sol es el peeling glicólico, que elimina manchas solares mediante la aplicación de un ácido glicólico que produce la descamación de la epidermis y la regeneración de la piel.