Todos, independientemente de edades, sexo o condición hemos sentido alguna vez dolor articular. Molesto, reiterado y alarmante, incluso, con el tiempo, según la frecuencia, zonas e intensidad, incapacitante. Se trata de una sensación que nos incomoda e impide que desarrollemos con la habilidad necesaria nuestra jornada habitual y tareas cotidianas, a veces, difícil de conllevar.

Pero, ¿qué sabes realmente sobre dolor articular?
TweeG, suplementación natural conoce al dedillo el dolor articular, origen y desarrollo y hoy nos explica todo aquello que debes saber sobre el mismo.

Los tipos de articulaciones que suelen doler son las de los dedos de las manos, las rodillas, las caderas, los tobillos y los hombros, esto es debido a que se enfrentan a la presión y las lesiones como parte de los movimientos cotidianos.

Las articulaciones sinoviales son las principales articulaciones del movimiento del cuerpo humano. Éstas se enfrentan a diario con distintas presiones y con frecuencia pueden sufrir daños que producen dolor articular. Un hecho constatado, directamente relacionado, además, con nuestro trabajo, ya que en algunos de ellos, el dolor articular puedes verse agravado o potenciado por los gestos repetidos y posturas reiteradas que el mismo les obliga a hacer cada día.
"Nadie está a salvo del dolor articular, pues desde personas jóvenes, a personas que practican algún deporte, pasando por trabajadores tanto de cadenas de montaje, peluqueros y peluqueras que soportan el peso del secador, masajistas, esteticistas que hacen presiones, como obreros y operarios en donde su día a día es el trabajo articular y muscular", nos aseguran los expertos TweeG.

El 88% de los españoles que sufre dolor corporal dice sentir dolor en las articulaciones.

Definición científica

El dolor articular afecta a distintas zonas del cuerpo, como los dedos de manos y pies, las muñecas o las rodillas, principalmente y suele ir unido a rigidez, dolor a la palpación e inflamación. El dolor articular, la artritis o la artrosis (la forma más frecuente de artritis) puede ir acompañado de inflamación de una o más articulaciones y se produce de distintas maneras. Por ejemplo, en la artrosis, el cartílago de la articulación (el tejido esponjoso que protege las articulaciones) se deteriora, y su capacidad para regenerarse es limitada, lo que produce una pérdida de cartílago con el tiempo. Como resultado, los huesos desprotegidos se rozan uno contra otro y producen inflamación, dolor y producen inflamación, dolor y protuberancias óseas en la articulación, provocando así rigidez y dificultad de movimiento.
En concreto, y en los casos de osteoartritis, la capa protectora de las articulaciones puede dañarse y hacer que la articulación esté hinchada, rígida y duela.

Pero no sólo eso, junto a dedos de manos y pies, muñecas o rodillas, los hombros, caderas y tobillos también pueden verse afectados por este tipo de dolor que puede llegar a resultar incapacitante. Y lo que es más alarmante junto al entumecimiento, hormigueo y rigidez se produce una menor amplitud de movimiento.

La articulación de la rodilla es especialmente vulnerable porque soporta todo el peso del cuerpo y cualquier fuerza adicional al correr o saltar.

En concreto, existen seis tipos de articulaciones sinoviales que hacen posible la mayoría de movimientos del cuerpo: las rótulas por ejemplo en hombros y cadera, articulaciones sinoviales en pivote en el cuello, las planas o artrodia en muñecas y tobillos, la silla de montar o de ancaje recíproco como base de los pulgares, en bisagra o troclear en rodillas y codos y las condileas o elipsoidales que permiten el movimiento lateral, por ejemplo en dedos de manos y pies.
Todas ellas zonas del cuerpo que los profesionales peluqueros y masajistas y esteticistas utilizan a diario y sobreexponen al esfuerzo, siendo absolutamente vulnerables y sujetos predispuestos a padecer dolor articular.

Así, y en resumen, destacar que entre las causas comunes del dolor articular se encuentran la artrosis, los esguinces o las fracturas derivadas de lesiones o accidentes. Existen factores de riesgo que aumentan la probabilidad de padecer dolor articular, como daños en la articulación por lesiones o intervenciones quirúrgicas anteriores, la predisposición genética, la estructura anatómica de las articulaciones afectadas y la obesidad, ya que en este caso las articulaciones se ven expuestas a una presión excesiva y reiterada por cuestiones tales como las posturas y gestos diarios realizados en el trabajo, por ejemplo.

Prevenir y tratar

Por todo ello, nada más importante que prevenir en lo posible, y sobre todo tratar el dolor articular. "En TweeG Nutritional Supplement® ayudamos a reducir los dolores articulares con Articulaciones Plus, una fórmula con Glucosamina, Condroitina, Cartílago de Tiburón, MSM, Cúrcuma, Harpagofito y Ádico Hialurónico", nos explican sus expertos.

» Una fórmula única y rica, poderoso cóctel de componentes, estudiada para tratar el dolor articular:

» La glucosamina, naturalmente presente en los tejidos del cuerpo, está particularmente concentrada en las articulaciones. Ella nos permite mantener la buena salud de los cartílagos y es indispensable para la movilidad y para la flexibilidad articular. Diferentes estudios han demostrado que la glucosamina es incluso más eficaz cuando está asociada a la condroitina.

» La condroitina es un constituyente esencial del cartílago que posee un poder lubricante. Contribuye también a mejorar la movilidad. El papel de la condroitina es primordial para la solidez y la flexibilidad de las articulaciones.

» El metilsufonilmetano (MSM) es un compuesto sulfurado. Gracias al azufre que contiene, el MSM contribuye a mantener el buen estado de los tejidos conectivos (tendones, dermis profunda, colágeno, cartílago, etc.) y a limitar la rigidez de los ligamentos, de los músculos y de las articulaciones sensibles. Como para la asociación glucosamina-condroitina, ciertos estudios han demostrado una eficacidad incluso más importante del MSM cuando lo asociamos a estos dos nutrientes.

» El cartílago de tiburón tiene una acción regeneradora de las articulaciones.

» Por su parte, el ácido hialurónico provee hidratación a las mismas.

» Y la cúrcuma y el harpagofito han demostrado ser buenos antiinflamatorios naturales sin efectos secundarios.









Recomendamos