Facialista confesa y reconocida, al frente de los centros de estética Blauceldona (acaba de inaugurar el tercero), Silvia Oliete no es solo una alquimista de la belleza en cuanto a sus manos, fórmulas, tratamientos y atención al cliente, sino que va más allá y domina y contribuye con su saber hacer al lenguaje de la estética, materia viva, que se ha de saber descifrar para después aplicar con máximo acierto y resultados de tan buenos, sorprendentes.

Así podríamos definir de hecho su labor y trabajo diario, que le han convertido no sólo en una de las más reputadas profesionales de nuestro país, sino también en una emprendedora en toda regla, al frente de la cadena Blauceldona, ya objeto de culto, y su propia línea cosmética, que ha empezado con el lanzamiento de I AM THE SERUM (no podemos imaginar un nombre más acertado, todo lo dice...).

Nada mejor que hablar con ella y descubrir algunos de sus secretos y tesoros mejor guardados no solo de la belleza sino también de la empresa. ¡Comenzamos!

Una facialista es tu esteticista de confianza que conoce tu piel perfectamente y sabe en qué momento debe dar los ingredientes oportunos para que ésta, la piel, esté siempre perfecta.

Beauty Market: Acabas de abrir tu tercer centro en Barcelona, ¿por qué aquí y ahora?
Silvia Oliete: Curiosamente, y después de casi un año y medio sufriendo la consecuencias y restricciones de la pandemia, abrimos tras el confinamiento, el día 4 de mayo 2020, y vimos cómo Blauceldona experimentaba un crecimiento exponencial. En un principio pensamos que sería consecuencia de la necesidad surgida tras tantos meses de privación por parte de los clientes, pero comprobamos que la demanda no cesaba, y que ocurría en todos nuestros centros por igual. Esto supuso una gran presión en todos los equipos, y fue la clave para decidirme a abrir este tercer nuevo centro en la calle Milanesat 32 de Barcelona. El enclave era una cuestión personal, ya que este es el barrio barcelonés en el que nací y he vivido toda mi vida, y en este mismo local mi padre regentó durante 45 años su negocio. Es algo muy sentimental, estar aquí es casi una necesidad, y además hay un público muy interesado en cuidarse bien.

B.M.: El secreto de tu éxito.
S.O.: La profesionalidad, trabajar bien y con tecnología puntera pero, sobre todo, tener profesionales a las que he ido formando personalmente en mi propia "escuela". Haber pasado 23 años de mi vida en cabina me ha dado muchísima experiencia y sé bien las demandas que de ella salen. Solo así puedes dirigir de una manera diferente pero pragmática y objetiva, entendiendo la profesión y sabiendo perfectamente cómo tratar, qué tratar y cómo aconsejar de una manera exitosa. Hablar el lenguaje de la estética, que como todas las lenguas es orgánica y va mutando, es clave.

La tendencia es trabajar manualmente combinando con aparatología para ayudar a diferentes niveles, más interno, manteniendo el masaje como parte crucial del diálogo entre la esteticista y la persona.

B.M.: ¿Qué es una facialista, Silvia?
S.O.: Una facialista es tu esteticista de confianza que conoce tu piel perfectamente y sabe en qué momento debe dar los ingredientes oportunos para que ésta, la piel, esté siempre perfecta o cómo llegar a esa perfección, trabajando dependiendo de la época del año y las necesidades correspondientes, hidratación, arrugas, reafirmación... Una que no se deja guiar por las tendencias y solo añade a su carta aquellas novedades que de verdad suman un nuevo valor a su carta de tratamientos.

B.M.: No obstante, ¿hacia dónde tiende la belleza actual? ¿Qué demandan los clientes y que ofrece la esteticista?
S.O.: La tendencia es trabajar manualmente combinando con aparatología para ayudar a diferentes niveles, más interno, manteniendo el masaje como parte crucial del diálogo entre la esteticista y la persona.
De hecho, esa es la clave del éxito de mi masaje de remonte Silvia Oliete, en el que tan solo con una sesión puedes observar cómo crece el tejido y su pulposidad y su hidratación. Por suerte, parece que empezamos a ver cómo se alían ambos puntos, lo que piden los clientes y lo que queremos ofrecer los profesionales, la gente se deja guiar, y yo sé que funciona.

El enclave de este tercer nuevo centro era una cuestión personal, ya que este es el barrio barcelonés en el que nací y he vivido toda mi vida, y en este mismo local mi padre regentó durante 45 años su negocio.

B.M.: ¿Qué importancia tienen las manos?
S.O.: Para mi muchísima, como decía. Me encanta trabajar con las manos en todos los faciales. Como herramientas de belleza, son irremplazables, ninguna aparatología podrá ofrecer nunca lo que consiguen las manos. Son las únicas que palpan, que hablan a la especialista más allá de la vista, son capaces de darnos muchísima información y establecen un vínculo con la persona irreproducible de manera artificial.

B.M.: ¿Cómo se integran entonces con la aparatología en belleza?
S.O.: Por ejemplo, Endermolift, Indiba y en otros muchos tratamientos avanzados, seguimos trabajando con las manos como complemento, y los resultados son siempre superiores. Lo importante, insisto, es combinar bien, lo que hace la tecnología, dónde y como actúa, las manos lo deben complementar.

B.M.: Las reglas básicas que debe cumplir un centro de belleza son...
S.O.: Limpieza, higiene, ambiente relajado y profesionalidad son innegociables, y poder ofrecer tratamientos nuevos que nos permitan obtener resultados y beneficios también nuevos y/o alcanzar nuevas metas.

B.M.: Tu web es una carta de invitación abierta a conocer y disfrutar de Blauceldona, sus tratamientos y sus marcas. Dispones de cosmética propia y tienda de productos. ¿Por qué esta apuesta del comercio on-line?
S.O.: Yo inauguré mi tienda on-line hace muchos años, fui pionera en el e-commerce, así como en nuestra App que ya hace más de dos años que la tenemos para reservas on-line. El comercio on-line nos ha permitido llegar tanto a clientes de Blauceldona como a muchas otras personas que no pueden venir a nuestros centros con la asiduidad que querrían, o bien viven en otras partes del país, pero sí quieren acceder a nuestra exquisita oferta porque conocen lo que hacemos y depositan en Blauceldona su confianza para cuidarse con lo mejor, de la mejor manera posible.

Ya ha pasado el suficiente tiempo para ver cómo los resultados de procedimientos y técnicas muy agresivas pueden dar paso a problemas y a un aspecto nada natural a medio y largo plazo.

B.M.: ¿El futuro de la belleza pasa sí o sí por el e-commerce?
S.O.: ¡Absolutamente!, En nuestro e-commerce vendemos muchísimos tratamientos, no solo cremas para regalos todos los días. Además, nuestro reparto es en el mismo día en Barcelona ciudad y en 24 horas en el resto de destinos nacionales. Hemos incluido nuevas formas de consumo, y el e-commerce nos abre puertas geográficas y temporales a las que antes no podías acceder, es algo orgánico que ocurre de manera bilateral, tanto por parte de los clientes que aumentan su demanda, como por la nuestra, que la ampliamos y mejoramos constantemente.

B.M.: ¿Por qué decides crear tus propios cosméticos?
S.O.: Tras tantos años trabajando con las mejores marcas del mercado, decidí que era el momento de crear un producto, aliando mi experiencia, lo que sé que funciona, con activos de vanguardia avalados por la investigación científica, que diese respuesta a la principal necesidad de todas las pieles, la hidratación. No ha sido fácil, pero I AM THE SERUM es justo lo que quería, lo que sabía que se podía conseguir, un verdadero Ferrari de la hidratación. Además, con inmejorable acogida, está alimentando mis ganas de hacer crecer la línea con nuevos productos en los que ya estoy trabajando.

Han sido casi dos años hasta configurar el producto que quería, inexistente hasta ahora y con los mejores ingredientes. Nos ha exigido un alto ritmo de trabajo, de investigación, formación; de entrega.

B.M.: Lo más difícil de esta apuesta.
S.O.: Han sido casi dos años hasta configurar el producto que quería, inexistente hasta ahora y con los mejores ingredientes. Nos ha exigido un alto ritmo de trabajo, de investigación, formación; de entrega. Parte del proceso lleva tiempo, pero hemos aprendido también que tienes que ser paciente para ir dando los pasos correctos, la verdad, se hace difícil.

B.M.: ¿Y lo más gratificante?
S.O.: El feedback que estoy teniendo con mis clientes, es una textura que engancha, que enamora para tener la piel jugosa e iluminada, que es como la piel refleja de manera inmediata y acumulativa que un producto está actuando de la mejor manera, ofrece lo que la gente busca obtener.

B.M.: ¿El futuro es la belleza natural, limpia y sostenible?
S.O.: Con total seguridad, la tendencia a los tratamientos médicos creo que va a ir a la baja, muchas mujeres apuestan por tener una piel bonita a cualquier edad sin recurrir a procedimientos invasivos. Ya ha pasado el suficiente tiempo para ver cómo los resultados de procedimientos y técnicas muy agresivas pueden dar paso a problemas y a un aspecto nada natural a medio y largo plazo. Además, todos somos más conscientes del impacto ambiental que tiene absolutamente todo lo que hacemos y consumimos, y la belleza está hoy más ligada que nunca a un concepto que busca la máxima sostenibilidad posible.

B.M.: ¿Cómo te formas y reciclas?
S.O.: Por un lado, atendiendo a las formaciones profesionales de las marcas y tecnologías con las que trabajamos, todas pioneras y a la vanguardia de la investigación en este mercado. Además, es importante estar atenta a todo lo que sucede en el sector, aquí y en otros países. Saber leer el ritmo de la industria es clave, no solo para seguir creciendo y formándote, sino para conocer novedades.

Para mí, la estética es una profesión maravillosa, muy bonita con la que disfruto muchísimo cada día, tanto todo mi equipo como yo, y ver que los clientes obtienen los beneficios que buscan o incluso mejores, es la mejor recompensa al esfuerzo invertido.

B.M.: ¿Y cómo mantienes al día y en plena forma a tus equipos?
S.O.: Yo formo de manera constante a mi equipo en ventas, en atención al cliente y en nuevos protocolos. Protocolizo todos los tratamientos que hacemos en Blauceldona para mantener unos estándares impecables propios, de manera que para ellas no sea una formación al uso, tediosa y obligada, sino un dialogo para formar equipo y que obtengamos todos una visión y calidad inmejorable, que también les facilita el trabajo en el día a día.

B.M.: ¿Tu próxima meta?
S.O.: Crear toda la línea antiedad SO | Silvia Oliete. Es algo que me hace mucha ilusión porque complementa mi labor con Blauceldona.

B.M.: ¿Feliz, Silvia?
S.O.: Para mí, la estética es una profesión maravillosa, muy bonita con la que disfruto muchísimo cada día, tanto todo mi equipo como yo, y ver que los clientes obtienen los beneficios que buscan o incluso mejores, es la mejor recompensa al esfuerzo invertido. Sí, soy feliz.









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