El nuevo producto está desarrollado para reparar, hidratar y nutrir la piel profundamente, facilitando la recuperación de su energía y elasticidad, evitando así el envejecimiento prematuro. El principio activo responsable de todos estos beneficios es el ADN marino, que consigue devolver a la piel del cuerpo sus niveles óptimos de hidratación, nutrición y tersura.
Para preparar el tratamiento es necesario realizar previamente un peeling a base de ácido tricloroacético (ATA) a una concentración mínima, que elimina células muertas y suaviza, además de ayudar a difuminar las hiperpigmentaciones en zonas como el escote.
Tras ello, se realiza un masaje de hidratación profunda con ácido hialurónico y bioplasma de ADN marino, rico en células madre vegetales, para estimular el metabolismo celular. Finalmente, se realiza una envoltura corporal con una mascarilla de algas marinas, rica en minerales y oligoelementos.
Se recomienda realizar una sesión del tratamiento antes y después del verano o en cada cambio de estación, con resultados visibles en la renovación, luminosidad y aspecto saludable de la piel.