El skincare despierta el interés de los usuarios hasta términos insospechados. El cuidado de la piel, que es lo que significa, importa y mucho, cada vez más, indican buscadores, estudios, encuestas y expertos.
De hecho el término en cuestión, skincare, es uno de los más utilizados (las cifras son millonarias) como entrada en Google y RR SS.
Así que nada mejor que estar al tanto de todo lo que nos proporcione el éxito en este sentido y consiga el mejor de los resultados, sano y saludable a la hora de acercarnos a esta ciencia que requiere de los mejores y más efectivos tratamientos.
Hoy, escogemos al aceite esencial de bergamota en nuestro periplo por el mágico mundo de la aromaterapia y aceites esenciales y pasamos a describirlo.
Aceite esencia de bergamota, origen
El aceite esencial de bergamota se obtiene de la cáscara de la naranja bergamota (Citrus bergamia).
Se caracteriza por su particular aroma cítrico con notas florales que suele aprovecharse en aromaterapia con fines medicinales. Asimismo, por su concentración de nutrientes y antioxidantes se considera un aliado de gran poder para cuidar la piel.
Este fruto, la bergamota, es un híbrido de naranja amarga y limón cuyos extractos se usan como base para preparar perfumes, cosméticos, alimentos y dulces. Sin embargo, debe emplearse con precaución, pues no está exento de causar efectos secundarios.
Usos y propiedades del aceite esencial de bergamota
Por su aroma cítrico y su composición farmacológica, el aceite esencial de bergamota se emplea en una amplia variedad de productos para el cuidado personal. En particular, se puede encontrar en colonias, jabones, cremas corporales y cosméticos. Y por supuesto en masajes y tratamientos.
Se ha determinado que tiene propiedades antibacterianas, antisépticas y antiinflamatorias. De igual manera, se han observado efectos antioxidantes, ya citados, analgésicos y neuroprotectores.
En la medicina natural, el aceite esencial de bergamota se emplea como coadyuvante para reducir los síntomas de estrés, ansiedad y otros problemas de salud mental.
También se le atribuyen efectos positivos contra el colesterol elevado, la hipertensión arterial y los dolores.
En concreto, sus propiedades serían:
Tratamiento del colesterol.
Estado de ánimo. Expertos en aromaterapia sugieren que la inhalación de aceites esenciales puede transmitir señales al sistema límbico, región cerebral que regula las emociones. En consecuencia, induce a efectos fisiológicos que se ven reflejados en la disminución del estrés, la ansiedad y las alteraciones del ritmo cardíaco. No en vano la aromaterapia favorece el alivio de los síntomas de la depresión y otros trastornos del estado de ánimo.
Dolor e inflamación. Dos compuestos del aceite esencial de bergamota, el linalol y el carvacrol, se asocian a efectos analgésicos y antiinflamatorios.
Artritis y dolencias musculares. Los practicantes de aromaterapia suelen combinar este aceite con un aceite portador (de coco, de almendras o de oliva, entre otros) para calmar los síntomas de la artritis y las dolencias musculoesqueléticas. Con este fin, suele emplearse a modo de masaje.
Cosmética y salud de la piel. Las propiedades antiinflamatorias y antibacterianas de este aceite esencial son útiles para mejorar la salud de la piel. Su aplicación (combinado con un aceite portador) disminuye la presencia de acné, quistes y puntos negros. También se cree que favorece el alivio del eccema, la tiña y la psoriasis.
Uso capilar. Otras conclusiones apuntan que la bergamota puede suavizar el cabello y controlar el frizz. Incluso, se dice que favorece el alivio del cuero cabelludo irritado.
Riesgos y posibles efectos secundarios del aceite esencial de bergamota
El aceite esencial de bergamota puro es irritante para la piel. Por ello, no debe aplicarse de forma directa.
En su lugar, se combina con algún aceite portador u otro producto similar. Las personas con pieles sensibles deben hacer una pequeña prueba antes de usarlo. Si pasadas 24 horas no hay señales de reacción, se puede emplear sin problemas.
Una de las sustancias de este producto, el bergapten, es fototóxica. Es decir, aumenta la sensibilidad a la radiación ultravioleta, lo que conlleva problemas como la fotodermatitis. Por ello, tras usar el aceite se debe enjuagar bien la piel y aplicar abundante protector solar.
En la medicina natural, el aceite esencial de bergamota se emplea como coadyuvante para reducir los síntomas de estrés, ansiedad y otros problemas de salud mental.Por seguridad, no debe ser usado por niños, mujeres embarazadas, personas con hipoglucemia o pacientes que estén tomando medicamentos que aumentan la sensibilidad a la luz solar (como la ciprofloxacina, por ejemplo). En caso de dudas, hay que consultar al médico o farmacéutico.
Otras cuestiones a recordar sobre el aceite esencial de bergamota
¿Cómo utilizar el aceite esencial de bergamota?
Para aprovechar las propiedades del aceite esencial de bergamota hay varias opciones. La primera es a través de un difusor de aromas, ideal para hacer sesiones de aromaterapia. Este último puede reemplazarse con la dilución del aceite en agua hirviendo (del que se inhalan los vapores).
También es bueno mezclarlo con un aceite portador para aplicarlo mediante masajes en caso de dolencias.
Por último, es posible encontrarlo en suplementos para consumo vía oral. Es importante usar solo los que estén autorizados y no ingerir el aceite puro.