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La diseñó el médico, periodista y presentador de televisión británico Michael Mosley, en colaboración con la también periodista Mimi Spencer, tras experimentar con diferentes regímenes de ayuno intermitente. Todo ello tras la elaboración de una investigación encargada por la BBC al propio Mosley. Se trata de la dieta intermitente, discutida y valorada en distinta medida según la opinión de los expertos.

De hecho, es la última moda en el mundo de la nutrición. Comer, parar, comer... Este tipo de dieta es muy popular entre atletas. Y para mucha gente que quiere perder peso es el método definitivo, o así lo aseguran, creándose incluso una cultura en torno a ella y sus distintas proporciones de días de ayuno frente a los que no. Para Mosley y Spencer, la ideal es la 5:2, dos días alternos de ayuno frente a 5 comiendo.

De cara al inminente verano, las dietas son sin duda una de las paradojas, o no, más común entre hombres y mujeres. Y las dietas intermitentes, sobre todo por su naturaleza, que combinan días de ayuno con jornadas de libertada absoluta en lo referido a la ingesta de alimentos, no lo son menos. Por eso qué mejor que recurrir a la visión de un experto nutricionista para saberlo todo acerca de este revolucionario 'régimen', si es que así se le puede llamar rigurosamente al contemplar días calóricos exentos de límites.

Es en este caso la doctora Paula Rosso, quien nos da su visión acerca de las dietas intermitentes, las cuales, nos adelanta la experta nutricionista, "se basan en comer normalmente durante 5 días y ayunar 2, o si se quiere una pérdida de peso más rápida, comer normalmente durante 4 y hacer ayuno durante 3 días en jornadas alternas. Una vez se haya logrado perder peso, durante la fase de mantenimiento hay que mantener un día de ayuno a la semana, es decir, 6 a 1".

Especialista en medicina preventiva y antiaging de la Clínica Lajo Plaza, la doctora Rosso posee una amplia y dilatada carrera al frente de este capítulo en el que la nutrición es clave. De hecho, concibe la salud y la belleza desde la misma, habiendo declarado en más de una ocasión que "la micronutrición, aportando las vitaminas, proteínas y minerales que nuestro organismo es incapaz de reponer a través de la alimentación, junto al ejercicio físico, son herramientas imprescindibles para alcanzar nuestros objetivos en cualquier dieta".

Así que. partiendo de esta premisa y concepto de dieta y salud, recabamos la opinión de la doctora acerca de las famosas y debatidas, dietas intermitentes.

Beauty Market.: ¿En qué consisten las dietas intermitentes?
Dra. Paula Rosso.: Es una dieta 'inventada' y que salta a la fama de manos del periodista y presentador de televisión británico Michael Mosley, en colaboración con Mimi Spencer, también periodista, tras experimentar con diferentes regímenes de ayuno intermitente y que ahora llega hasta nosotros. Como ya he adelantado, se trata de combinar días de ayuno con jornadas de libertad en lo referido a la ingesta de alimentos. La proporción es de 2 días de ayuno a la semana o 3 días si se quiere perder peso más rápido, no seguidos, sino alternos y un periodo de mantenimiento en el cual se ayunaría un solo día.

B.M.: Doctora, realmente, ¿las dietas intermitentes funcionan?
P.R.: Se ha comprobado a través de estudios que esta dieta es eficaz a la hora de adelgazar, logrando una perdida en mujeres de aproximadamente medio kilo a la semana y algo más en los hombres, pero no hay estudios de los beneficios que aporta a nivel de salud y que tanto pregona este plan.

B.M.: ¿Cuántas calorías habría que consumir en cada periodo?
P.R.: Durante los días de ayuno se debe reducir aproximadamente el 75% del consumo calórico habitual, es decir, 500 calorías para las mujeres y 600 para los hombres. Mosley no especifica lo que se puede consumir en los días libres, pero para perder peso tiene que ser una dieta de unas 2.000 calorías.

B.M.: ¿Hay una lista de alimentos prohibidos y permitidos?
P.R.: Los alimentos que se consuman los días de ayuno deberán ser ricos en proteínas y fibra, carne, pollo sin piel, pescado y verduras con un bajo índice glucémico y deben evitarse los carbohidratos. Durante esta fase es importante hidratarse adecuadamente. Debemos repartir las comidas que hagamos, realizarlo sólo si tenemos buena salud y no prolongar este plan durante más de dos semanas. Deberían tomarse como una medida puntual, no como una dieta habitual ni como un estilo de alimentación.

B.M.: Por lo tanto, existen otras dietas más seguras.
P.R.: Sí, para instaurar unos hábitos y un estilo de alimentación saludable siempre es más recomendable seguir la dieta mediterránea o las disociadas.

B.M.: En la relación de días de ayuno propuestos por Mosley, ¿por qué proporción se decanta la doctora Rosso?
P.R.: Siempre preferimos hacer las dietas menos radicales, con lo cual me decanto más por la ecuación 5:2, dos días de ayuno frente a 5 que no, aunque, he de insistir, hay que prestar atención a lo que se come en los días libres. Es una cuestión de compensación. Si en los días libres ingerimos 5.000 calorías diarias terminaremos engordando.

B.M.: ¿En qué casos sí sería recomendable esta dieta?
P.R.: Para mantenerse en el peso después de seguir una dieta de adelgazamiento o para compensar excesos si se tiene tendencia a engordar. Todos tenemos temporadas donde, por razones distintas, desde un viaje a festejos familiares o momentos de mucho estrés, comemos más de lo habitual o nos alimentamos peor, aumentando la ingesta de calorías. Mi consejo es compensar esos excesos lo antes posible, no permitiendo que ese kilo o dos extras lleguen a instalarse.

B.M.: ¿Cómo podríamos asegurarnos la salud sin ponerla en ningún momento en riesgo en caso de las dietas intermitentes?
P.R.: Llevando una alimentación saludable y relativamente variada durante los días de ayuno y sin cometer excesos durante los días libres con los alimentos fritos, procesados, el alcohol o el azúcar.

B.M.: Por último, y si nos referimos a la dieta intermitente ideal, cuál sería la receta perfecta en los días de ayuno?
P.R.: En este caso, para mí la ingesta ideal en los días de ayuno sería:
Desayuno, café o té con 100 ml de leche desnatada + 2 yogures desnatados o café o té con 100 ml de leche + 1 yogur desnatado + una pieza de fruta pequeña o café o té con 100 ml de leche + 4 lonchas de pavo natural + un quesito desnatado.
Almuerzo y cena, una ración de carne magra, pescado o pollo a la plancha, hervido, al papillote o al vapor de 100 gr + una ración de verdura cruda, al horno o al vapor.