Los aceites esenciales son sustancias olorosas que provienen de las flores, hojas, frutas, cortezas, semillas y raíces, y aportan diferentes beneficios según el tipo que se aplique. Debido a su pureza no se deben extender directamente sobre la piel o el cabello porque pueden provocar quemaduras. No usar en bebés ni en niños menores de tres años. En ancianos y embarazadas, utilizar con precaución.
Para su correcta utilización, siempre hay que mezclarlo con aceites o cremas neutras. Los beneficios de esta sustancia son variados:
- Árbol de té: analgésico, antibacteriano, antinfeccioso, antiinflamatorio, antimicótico, antiparasitario, antivírico, fleblotónico, inmunoestimulante y neruotónico.
- Romero: analgésico, antibacteriano, antiespasmódico, antiinflamatorio, antimicótico, antitusivo, antivírico, cardiotónico, carminativo, cicatrizante, colerético, descongestivo venoso, desintoxicarte, digestivo, diurético, efecto neuromuscular, emenagogo, estimulante, hiperglucémico, litolítico, mucolítico, neurotónico, reductor del colesterol, regula la tensión arterial y tónico sexual.
- Sándalo: antiinfeccioso, astringente, cardiotónico, descongestivo, diurético, hidratante, relajante nervioso, sedante y tónico.
- Tomilllo: antimicótico, antiinfeccioso, antiinflamatorio, antiséptico, antiespasmódico, antivírico, diurético, inmunoestimulante, neurotónico, tónico sexual y uterotónico.
- Pomelo: astringente, antiséptico, antiinflamatorio, relajante, suavizante, digestivo, tónico y venotónico.
- Naranja dulce: antibacteriano, antiespasmódico, antiinflamatorio, calmante energético, analgésico, astringente, antiparasitario, antidepresivo, digestivo.
- Mandarina: antiséptico, antiespasmódico, antimicótico, calmante, tónico, depurativo, digestivo y tónico del organismo a nivel general.
- Manzanilla: antialérgico, antiespasmódico, antiinflamatorio, antimicótico, carminativo, cicatrizante, descongestivo, hormonal, tónico y digestivo.
Los aceites esenciales están muy relacionados con la belleza y el bienestar. Se utilizan tanto para combatir el envejecimiento como para tratar lesiones musculares.