Micropigmentación y microblading, diferencias y similitudes en diseño de cejas

Que si me hecho la 'micro', que si me he hecho el microblading en las cejas. ¡Ah!, pero, ¿no es lo mismo? ¿Qué es eso del microblading?

¡Cuántas veces te lo habrán preguntado! Está claro que existe una tendencia a incluir en el mismo saco, y en lo referido al diseño de cejas a la micropigmentación y al microblading, cuando en realidad se trata de dos técnicas distintas.

Lo que también es cierto, es que el mundo del pigmento ha entrado de lleno en el sector de la belleza, y la estética posee en el diseño de cejas con estas técnicas, micropigmentación y microblading, un aliado imprescindible a la hora de rentabilizar nuestro negocio y servicios.

Un poco de historia, nacimiento de la micropigmentación y el microblading

Pese a que la finalidad primigénea de ambos procesos sea la misma, disimular la caída de pelo en la zona, la micropigmentación y el microblading son técnicas con metodología y orígenes distintos y que han evolucionado mucho, haciendo suyo el arte del visagismo y el camuflaje en numerosos casos, incluso corporales. Los pigmentos consiguen disimular estrías, aumentar y rellenar labios y maquillar de modo permanente los ojos en el caso de la micropigmentación.

La micropigmentación nace a la estética en los años 90 en muchos centros de belleza, usándose no solo para la zona de las cejas, como decíamos, sino también para el diseño y maquillaje de otras zonas faciales y corporales. El diseño de la areola del pecho femenino, en casos de cáncer de mama, un protocolo del presente, es por ejemplo, una de sus actuaciones más revolucionarias.

Mas reciente es el microblading, el cual, sin embargo y curiosamente, proviene de un tatuaje japonés conocido como "Tebori" cuyo origen se remonta no obstante a más de 3.000 años de antigüedad.

Mientras la comúnmente denominada 'micro' (micropigmentación), parece sacarle ventaja al microblading, la mayoría de clientes y personas de a pie, meten a ambas en el mismo saco, el microblading, sin embargo, toma fuerza y se convierte en la técnica recomendada y preferida en determinados casos.

"El microblading en el diseño de cejas, despierta más de una pregunta e interrogante, existiendo un desconocimiento generalizado entre los clientes acerca de sus peculiaridades, pero también entre los propios profesionales de la belleza", nos comentan desde Barcelona Beauty School. "Una técnica novedosa que permite trabajos de cejas con resultados increíbles en casos que de otra manera poseen difícil resolución".

Pero vayamos por partes. Y señalemos, de modo concreto sus diferencias.

Micropigmentación vs. Microblading

Primero y más importante, para la realización del microblading no precisamos del uso de máquinas eléctricas y, a diferencia de otros tratamientos de maquillaje permanente como la micropigmentación, el dibujo de cada pelo se hace de manera individual, permitiendo modificar la forma y el color de la ceja, por lo que creamos con facilidad, un resultado mucho más natural y acorde a las reglas del visagismo en lo referido a lo que cada rostro necesita, con resultados de rejuvenecimiento y expresividad muy notorios.

En segundo lugar, y en contraposición, el tatuaje o maquillaje creado en la micropigmentación se suele hacer apoyado por un sombreado que otorga grosor a las cejas. Es permanente, mientras que el del microblading es semipermanente. A la hora de posicionar el pigmento en la micropigmentación éste va a permanecer entre la dermis y epidermis, mientras que el microblading es un tatuaje superficial que solo se deposita en la epidermis.

En cuanto a la duración de cada una, hemos de tener en cuenta que hay muchos factores que posibilitan que se desvanezca más rápida o lentamente el pigmento: su calidad, los productos y medidas de precaución usados para el cuidado de la piel tras el proceso del microblading o la micropigmentación, medicamentos, etc.). Eso sí, nunca, ni en el microblading ni en la micropigmentación va a llegar a desaparecer por completo. El microblading puede durar alrededor de un año o año y medio, mientras que la micropigmentación puede permanecer hasta dos o tres años.

Instrumentos y agujas utilizados

Una de las grandes diferencias entre ambas técnicas se centra en los instrumentos utilizados por cada una de ellas.

Mientras que en la micropigmentación utilizamos un dermógrafo con una aguja de punta con la que diseñamos y dibujamos los pelos y agujas de 3 o 5 puntas para los sombreados de relleno y diseño de la ceja, en el microblading se utiliza una pluma de metal, similar a un pequeño bisturí, en el que se insertan las agujas ultrafinas, que permite perfilar pelo por pelo para crear la forma de la ceja de una manera mucho más natural, este 'bisturí' realiza pequeñísimos cortes en los que posteriormente se deposita el pigmento.

En la actualidad existen cada vez más tratamientos con un tipo de agujas conocidas como agujas "nano", (nanoblading) o extrafinas creadas para dibujar pelo por pelo con una alta precisión y así crear una ceja pluscuamperfecta.

Todas las agujas y plumas utilizadas tanto en el microblading como en la micropigmentación han de cumplir con los estándares de sanidad de la Unión Europea y ser desechables para evitar infecciones o la transmisión de enfermedades.

Al igual que el pigmento debe ser inorgánico con base mineral puesto que son hipoalergénicos reduciendo el riesgo del implante y sin posibilidad de reacciones alérgicas.

Podemos encontrar diferentes tipos de agujas que pueden usarse para estas técnicas según el resultado final que busquemos. Las agujas van desde 7 hasta 28 pines, siendo cada número más alto, de un grosor mayor.

Las agujas de 7 púas se usan en cejas finas y en tatuajes de cejas semipermanentes para dibujar pelo por pelo de la forma más nítida posible.
Las agujas de 12 púas se recomiendan para tratamientos en cejas finas o estrechas.
Las agujas de 14 púas se usan en procedimientos en cejas largas y de mayor grosor ya que el diámetro de la aguja es mayor.
Las agujas de 18 púas en forma de U se usan en zonas curvas o cejas gruesas ya que su forma es arqueada.

Las agujas más finas han dado lugar al denominado nanoblading. "O el microblading en el que se afina todavía más la puntería", comenta Slow Life House.

Como ves, el mundo del pigmento da mucho que hablar y que hacer. El resto es cuestión de técnica y formación certificada, y de la habilidad y experiencia de tus propia manos, para hacer del microblading o la micropigmentación un servicio estrella en tu centro de belleza.

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