"A la gloria de los más famosos se adscribe siempre
algo de la miopía de los admiradores".
George Christoph Lichtenberg, profesor de
física y científico alemán (1742-1799).
En los últimos días hemos sido testigos de la presentación de personajes famosos como nuevas imágenes de marcas. En concreto, Paz Vega para L'Oréal Paris y Benjamin Millepied para Yves Saint Laurent.
La actriz Paz Vega, ganadora de un Goya por su interpretación en Lucía y el Sexo, acaba de rodar un spot de la nueva gama de productos Elvive Hidra-Colágeno, de la que es imagen.
Benjamin Millepied, bailarín del Ballet de Nueva York y coreógrafo de la película Cisne Negro, es más conocido por ser el prometido de la actriz Natalie Portman. Benjamin será la imagen de la nueva línea de perfumería de Yves Saint Laurent, que aún no tiene nombre.
La industria cosmética es muy propensa a utilizar famosos para promocionar sus productos. Brad Pitt, Angelina Jolie, Jane Fonda, Linda Evangelista, Katie Holmes, Ashley Green, Heather Morris y un sinfín de celebridades prestan su imagen a productos cosméticos. La combinación de productos exclusivos con personajes famosos nunca falla. Es una fórmula segura de captar más la atención.
El 70% de los consumidores consideran que un producto es más atrayente si lo presenta el rostro de un famoso, ya que se le relaciona con valores como éxito y belleza. Sin embargo aparecen estudios recientes donde los rostros de los famosos comienzan a cansar a los consumidores, ya que un mismo famoso hace publicidad de muchos artículos a la vez. También está el peligro de que el famoso en cuestión tenga una vida privada incorrecta y pueda perjudicar a la marca a la que prestó su imagen.
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