Aunque hace mejor tiempo y tenemos más ganas de salir, con la primavera aparecen los principales signos alérgicos que afectan al estado de la piel. Por este motivo, desde el centro de estética Rame, y de la mano de su directora Marina Rulló, recomiendan un tratamiento para prevenir y tratar la piel con signos de alergia.
La piel es un gran órgano que ejerce de escudo protector del cuerpo. A excepción de que afecte algún agente externo o que algún cosmético o alimento produzca alguna alteración, muchas veces la alergia se confunde por las siguientes causas: deshidratación, exceso de células muertas, interacción con el sol y pieles más sensibles por naturaleza, que requieren de un mayor cuidado.
Cómo tratar la piel con signos de alergia
- Se recomienda trabajar previamente en cabina con una media de tres sesiones para conseguir mejorar la textura (descamación) y la permeabilidad (hidratación) de la piel.
- Ya en el tratamiento en cabina, se realiza inicialmente una exfoliación del tejido para eliminar las células muertas. La exfoliación se realiza con una mezcla de aceites de almendras dulces, aguacate y germen de trigo. Esta mezcla da elasticidad al tejido y dulzura. Considerado como un tejido sensible, no es recomendable la agresión con peeling de micropartículas o ácidos.
- Posteriormente a la exfoliación, se efectúa una hidratación muy superficial para que el tejido dé comienzo a la hidratación.
- En las siguientes sesiones se aumenta el grado de hidratación para ir penetrando en las capas más internas, y se puede llegar a utilizar aparatología (mesoterapia virtual) para provocar una mayor penetración. Con ello se logrará solucionar algunos puntos destacados que tratar, como la deshidratación y exceso de célula muerta.
Interacción con el sol
La alergia al sol viene causada por la deshidratación del tejido. La exposición al sol de manera no controlada produce manchas, rojeces y eritemas. Es muy importante antes de empezar la exposición al sol, hacer un buen tratamiento en cabina para eliminar el máximo de células muertas y así evitar las manchas.
Antes de empezar la exposición al sol, hay que hacer un buen tratamiento en cabina para eliminar el máximo de células muertas y así evitar las manchas.Antes de exponerse al sol y de aplicar el protector solar, se debe utilizar una hidratante de base y después el protector, pues éste no puede a la vez hacer la función de crema hidratante y protector. De esta manera se evitarán las rojeces.
Las pieles sensibles deben cuidarse mucho y no excederse en el uso de cosméticos, ya que pueden alterar su pH. Se recomienda, a nivel general, a todo tipo de pieles, que las cremas utilizadas carezcan al máximo de perfumes (estos producen picores y alteraciones en la piel y los ojos) y que contengan un alto grado en hidratación.