Las ceras, dirigidas al sector profesional, se dividen en dos grupos. En primer lugar, las ceras liposolubles, sólidas a temperatura ambiente pero con un punto de fusión muy bajo, permiten un mayor número de reciclados, sin pérdida de sus propiedades depilatorias. Se formulan a base de colofonia (derivado de la resina de pino) y cera de abejas, lo que les confiere una gran elasticidad.
En segundo lugar, se hallan las ceras liposolubles, semisólidas a temperatura ambiente, pero que licúan fácilmente cuando se introducen en el aparato calentador-aplicador. Su composición (derivados glicólicos de la colofonia) les confiere una textura muy adherente al vello. Sus ventajas son su baja temperatura (perfecta para pieles sensibles al calor), su higiene (de un solo uso), comodidad y facilidad de aplicación (gracias al roll-on incorporado).
La cera caliente tradicional (a base de colofonia, derivado de la resina de pino, y cera de abejas) ha sido sustituida por nuevas formulaciones que mejoran su elasticidad y punto de fusión. Por otra parte, existe un auge de las ceras templadas, que son desechables. La firma Depil OK presenta sus novedades en ambos tipos de cera: la cera tradicional Canela, de un kilo, y Gin-Tonic y Canela, de 100 mililitros, en formato roll-on.
La cera Canela, en versión tradicional y roll-on, proporciona una gran experiencia sensorial gracias a su toque cremoso con insistente fragancia leñosa que contrasta con la dulzura de la canela. Por su parte, la cera Gin-Tonic ofrece una depilación con marcado carácter floral, cítrico y refrescante, dejando la piel lisa y con aspecto radiante.