El Incosol Hotel Medical Spa está sentenciado. El titular del Juzgado Mercantil número 1 de Cádiz ha ordenado el cierre definitivo del establecimiento y la extinción de los 138 contratos laborales existentes. La empresa Inmobiliaria Amuerga S.L. lleva en concurso de acreedores desde abril de 2012 y "han fracasado sus esfuerzos por mantenerlo abierto", según el auto difundido por diversos medios.
Los créditos contra la masa superan los 46 millones de euros y se adeudan también más de 20 millones a la Seguridad Social, Hacienda y proveedores. Reabrir el hotel supondría una inversión cercana a un millón de euros, a lo que habría que sumar los 250.000 euros en costes salariales mensuales, cifras inasumibles por la actual propiedad.
Los trabajadores del Incosol han estado sin cobrar sus nóminas desde que se declaró el concurso y la decisión judicial les permitirá ahora apuntarse al paro y solicitar pagos pendientes al Fondo de Garantía Salarial (FOGASA). Los sindicatos creen que, una vez el hotel quede libre de cargas laborales, aparecerán compradores interesados en el inmueble. "Seguro que se va a volver a abrir, pero sin la experiencia de tantos años de muchos trabajadores", ha comentado Lola Villalba, de CCOO.
El hotel Incosol abrió hace cuatro décadas, en abril de 1973. En sus habitaciones se han alojado figuras como el actor Stewart Granger, el rey Fahd, el presidente del Congo, el príncipe Rainiero de Mónaco y Grace Kellly, Sean Connery, Carmen Sevilla o Camilo José Cela.
Incosol Medical Spa fue un hotel de cinco estrellas, un avanzado centro médico y un completo spa con todo tipo de tratamientos corporales, faciales y masajes, especializado en adelgazamiento, medicina preventiva y relax, siempre de la mano de expertos profesionales.