Sus resultados son tan evidentes que ya se ha convertido en la máquina con lista de espera. Y se llama Cyclone.

Hasta 10 centímetros han llegado a perder algunos de los pacientes tras someterse al tratamiento con Cyclone. Y sin renunciar a un cuerpo modelado, evitando el descolgamiento de piel tan antiestético después de una pérdida de volumen tan grande. Además, la celulitis y la retención de líquidos también dejan de ser un problema desde las primeras sesiones.

Los secretos de Cyclone

Unifica en una sola aplicación las mejores técnicas:

  1. Ultrasonidos focalizados que rompen las moléculas de grasa gracias a la emisión de calor. Consigue eliminar la celulitis y reducir el volumen de manera localizada.
  2. Ultrasonidos de cavitación que impactan contra las células de grasa y las rompen reduciendo la celulitis dura localizada.
  3. Vacum rotatorio único en el mundo. Drena, moldea y elimina el exceso de líquidos hasta conseguir la total eliminación.
  4. Radiofrecuencia monopolar para tratar grandes zonas con acúmulos grasos con el fin de reafirmar la piel, evitar la flacidez y alisar las ondulaciones de la piel provocadas por la celulitis.
  5. Radiofrecuencia bipolar para trabajar en zonas más pequeñas y en tratamientos faciales.

Tratamiento Cyclone

Con sesiones de hora y media, aplicadas una vez por semana, los resultados se hacen evidentes. Lo recomendado es emplear entre 6 y 12 sesiones. La mejora es muy notable. Como ejemplo, en la zona abdominal, se han contabilizado pérdidas de hasta 12 centímetros.

Los principales centros de estética de nuestro país ya cuentan con esta tecnología de última generación desarrollada para combatir de manera efectiva no solo la grasa acumulada sino también las consecuencias derivadas de su eliminación. Gracias a Cyclone perder peso, acabar con la celulitis y modelar la figura, es posible. Todo en un solo tratamiento.









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