"En los sueños y en el amor
no cabe lo imposible".
Janos Arnay, poeta húngaro (1817-1882).
Un plan para dos, una escapada y un tratamiento spa. Hace años que San Valentín se ha transformado. Lejos han quedado los regalos convencionales para dar paso a las experiencias. Y siempre es una vivencia compartir belleza para dos, un masaje para estar estupendo, la sesión de maquillaje y estética, y un tratamiento facial o corporal con el fin de rejuvenecer la piel.
La fiesta de San Valentín, que tiene lugar el 14 de febrero, es una celebración tradicional, siendo San Valentín el patrón de los enamorados. Es fuertemente popular en muchos países, especialmente en los anglosajones, expandiéndose a otros lugares ya a partir del siglo XX. Ahora este día puede ser compartido entre la pareja en centros de estética, spa y en establecimientos afines, porque ahora muchos tratamientos son unisex, dirigidos al wellness y la nutrición, válidos a la vez para hombres y mujeres. En los días previos a esta fiesta tan romántica, las empresas de estética deben ofrecer diversidad de tratamientos para que los usuarios se sientan especiales. El negocio no para: antes, durante y después de San Valentín.
En cuanto a regalos originales, algunas firmas de cosmética aprovechan esta jornada para lanzar productos nuevos y otros especialmente indicados, en exclusiva, para estas fechas. Fidelizar al cliente y aumentar la facturación en un mes complicado, como es febrero, es el objetivo del que se dice que es uno de los días más románticos del año.
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