El Auditorio del Hotel Ilunion de Barcelona fue el lugar de presentación de la Asociación Profesional de Estética Oncológica, APEO, especializada en tratamientos estéticos dirigidos a pacientes bajo terapias oncológicas con el fin de proporcionarles una mejor calidad de vida.
Nacida en Milán, Italia, en 2013, y dentro del Instituto Europeo de Oncología (IEO), "este proyecto pasó de ser algo temporal a una parte integral del hospital, gracias a la cooperación entre médicos, pacientes y esteticistas", afirman sus fundadoras, la doctora Carolina Ambra, y Loretta Pizio, esteticista.
Esteticistas profesionales formadas
Su presentación en España tiene el fin de fomentar el conocimiento del proyecto y ofrecer formación a esteticistas profesionales, a través de conocimientos teóricos y prácticos con los que aliviar los efectos dolorosos y discapacitantes, así como las alteraciones estéticas.
APEO defiende firmemente la incorporación de tratamientos estéticos como apoyo a las personas que afrontan sesiones de radioterapia o quimioterapia, o bien se hayan sometido a cirugía.En Italia, ya se han formado más de 200 profesionales en esta especialización, y en España, se ha iniciado un curso en octubre y se quiere promocionar esta formación que sigue unos estrictos protocolos de estética oncológica.
"Esperamos que en España tenga una gran acogida. Ya estamos hablando con hospitales para establecer colaboraciones juntas", explica Nuria Sánchez, esteticista especializada en estética oncológica y representante de APEO España. Para ello se establece el llamamiento de APEO, que apuesta por la creación de una red institucional de operadores cualificados para garantizar que todos los pacientes puedan recibir este tipo de tratamientos.
Cursos APEO
Los cursos de la Asociación tienen una duración de 120 horas, divididos en 15 seminarios temáticos. Se enseñan técnicas y protocolos de belleza y bienestar basados en principios médico-científicos. Las esteticistas deben superar un examen teórico-práctico y obtienen un título de Socio Operador APEO; con la exigencia de una formación permanente.
Sus fundadoras reconocen que, gracias al cuidado de la piel, hay importantes avances para la salud física y emocional de los enfermos de cáncer. "Ayudan a mejorar su calidad de vida, aliviar parte del dolor y afrontar con una actitud más positiva los efectos de estas terapias", explican. Entre los tratamientos que se realizan, Nuria Sánchez destaca que, siempre dependen del grado de la enfermedad, el tiempo y las condiciones de cada paciente, y "que se llevan a cabo junto al médico que lleva a cada paciente". Entre estos tratamientos destacan el masaje descontracturante, drenaje linfático manual, tratamientos nutrientes y regenerativos, maquillaje correctivo, manicura y pedicura, cuidado de la piel y depilación.
La asociación promueve, mediante el Llamamiento APEO, la creación de una red institucional de operadores cualificados para garantizar que todos los pacientes puedan recibir este tipo de tratamientos.Al acto también asistió el oncólogo Pere Gascón, quien explicó que los servicios de estética a pacientes forman parte del tratamiento, junto a la alimentación, el ejercicio... si bien reconoce que este tema todavía debe desarrollarse en los hospitales españoles. Mientras que Alba Català, dermatóloga de Clínica Teknon, resaltó la figura de la esteticista especializada en oncología, ya que la aplicación de cremas especiales antes y durante el tratamiento es básico.
La psicóloga Eva Juan remarcó que el bienestar obtenido aporta una mejor calidad de vida a los pacientes, y es lo que se busca; y Montserrat Doménech, presidenta de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA) y de Grupo Ágata (Asociación Catalana de Mujeres Afectadas por el Cáncer de Mama), apoyó a la Asociación y su impulso en España.
Durante el acto se realizó una demostración de un masaje descontracturante que se practicó a una paciente. Los fisioterapeutas explicaron que el masaje siempre debe hacerse boca arriba, con el cuerpo alineado para mantener una respiración correcta, siendo suave y superficial. En este caso el objetivo es relajar a la paciente.