Pues sí: usar las velas perfumadas de la forma adecuada tiene más miga de lo que parece.
Porque no basta con encenderlas y olvidarse de ellas, Volonté Bougie te da unos consejos esenciales para aprovechar al máximo tus velas y lograr una combustión perfecta.
El secreto está en la primera quema
La primera vez que enciendas una vela, asegúrate de dejarla encendida durante un máximo de 4 horas o hasta que toda la superficie de la cera se haya derretido y formado un charco líquido en el vaso. Esto garantiza que la vela se queme de manera uniforme y eficiente.
Que la cera se derrita por completo
La cera de la vela debe derretirse por completo en cada uso. Asegúrate de disponer del tiempo suficiente para que la capa superior de cera se derrita en su totalidad. Así evitarás el proceso de tunelización, que puede dificultar el futuro encendido y la calidad de la combustión de la vela.
Recorta la mecha
Después de apagar la vela y permitir que la cera se enfríe, recorta la mecha. Deja aproximadamente un centímetro por encima de la cera para garantizar una combustión uniforme y de calidad.
La mejor manera de difundir la fragancia
El aroma de la vela está en el líquido aromático, no en la llama. Para prolongar la fragancia en tu hogar, asegúrate de que la cera forme un charco de aproximadamente un dedo de profundidad. Cuanto más charco tenga la vela, más aromatizará cada rincón de tu casa.
¿Fuego camina contigo? Algunos consejos adicionales:
- Las velas perfumadas con adornos incrustados son más adecuadas como uso decorativo.
- Coloca la vela en un lugar seguro, lejos de materiales inflamables y corrientes de aire.
- Una vez encendida, evita mover la vela para mantener la estabilidad de la mecha y la cera.
- Mantén las velas fuera del alcance de niños y mascotas para evitar accidentes.
- Vigila la longitud de la mecha. Si es demasiado larga, córtala para prevenir la formación de humo.
- Protege las superficies donde coloques las velas para evitar daños por el calor o la cera derretida.
Un tip extra: elige velas de cera de soja
La cera de soja ofrece múltiples ventajas. Es un recurso renovable, natural y biodegradable; es fácil de limpiar, tiene un punto de fusión más bajo y no produce ningún residuo tóxico. Además, su tiempo de quemado es de 2 a 3 veces mayor que el de la cera de parafina, y produce muy poco hollín y residuos.