Terapia Biodinámica, esa gran desconocida

La Terapia Biodinámica es una terapia muy desconocida en nuestro país, no así en el resto de Europa, donde es muy utilizada, sobre todo en Francia. Funciona al igual que la terapia cráneo-sacral, la cual es en realidad una parte de la biodinámica, que el doctor William Garner Sutherland (1873-1954) empezó a trabajar de manera independiente a principios del siglo XX, alcanzando una gran trascendencia en pocos años.

La Biodinámica actúa de manera integral sobre el cuerpo y la salud. Ayuda al cuerpo a curarse a nivel físico, emocional y energético. Y lo más sorprendente es que el cuerpo se cura por sí mismo, como cuando cura un sencillo corte o rasguño. Es una terapia indolora, capaz de solucionar lesiones antiguas de caídas o accidentes, y con la que se pueden tratar casi todas las patologías (incluidas párkinson, escoliosis o fibromialgias, entre otras de difícil tratamiento).

Es apta para todas las edades, incluidos los niños, ya que a menudo las patologías que tenemos de adultos provienen de golpes que nos hemos hecho de niños o jóvenes y que, aparentemente curados, en realidad, lo que han hecho es modificar la estructura del cuerpo para reencontrar el equilibrio. Esta falsa reconstrucción tendrá consecuencias en la vida adulta, puesto que no dejará que los tejidos trabajen correctamente y, a la larga, aparecerán las dolencias. La Biodinámica en niños puede actuar de manera preventiva.

Carme Massa.

La osteópata catalana Carme Massa descubrió la terapia biodinámica, de forma casual, en el 2012, mientras buscaba cómo trabajar la osteopatía en los niños y se inscribió en un curso de biodinámica con Bernard Darraillans (1949-2020), uno de los grandes investigadores y promotores de la terapia Biodinámica. Desde entonces, Carme Massa es una firme impulsora de la Biodinámica, tanto en su uso como terapia que ella utiliza con sus pacientes, como para darla a conocer a través de formaciones aptas para todos los bolsillos, puesto que los cursos de biodinámica existentes hasta entonces eran algo elitistas y, por otra parte, poco intuitivos a nivel de contenido.

Massa, a sus 68 años, ha decidido que quiere popularizar la biodinámica, que se convierta en una terapia conocida por todo el mundo, como cuando alguien dice que va al fisio, al osteópata, o que va a hacerse acupuntura o reiki, y que llegue a ser aprendida y utilizada por el máximo de terapeutas posibles, porque, en palabras de la propia Massa, “si tenemos una terapia que orienta al cuerpo a curarse solo, ¿por qué no potenciarlo y que cada uno se cure a sí mismo, en vez de realizar tratamientos agresivos, que provocan dolor y sufrimiento?”.

Por eso, creó Magoterra, desde donde ofrece seminarios presenciales y on-line sobre terapia biodinámica. En la web de Magoterra se encuentra también un blog con artículos donde se puede ampliar la información sobre la peculiaridad del tratamiento.

Biodinámica

La biodinámica trabaja lo físico, lo emocional y lo energético, porque la persona es una unidad. En biodinámica se trabaja el conjunto. El síntoma expresa que la persona no está bien y con biodinámica se localiza el origen de ese dolor.

El cuerpo manifiesta los traumas emocionales físicamente, porque guardan relación con el campo energético que nos rodea. Carme Massa está llevando a cabo webinars donde explica por qué ocurre esto y por qué hay una respuesta del cuerpo.

La Terapia Biodinámica no es canalización, es movilización. De forma muy resumida, se caracteriza por:
a) Utiliza la Ley del Observador: el terapeuta escucha el movimiento del campo electromagnético del cuerpo. El paciente se trata a sí mismo a través de los líquidos.
b)Funciona porque es profunda: no se trata el dolor, se trata la causa y el cuerpo la repara, es capaz de solucionar lesiones antiguas de caídas o accidentes.
c)Es indolora: la terapia consiste en mover información del cuerpo al cerebro, que es quien tiene la respuesta, en ningún momento se manipula el cuerpo.
d)Es relajante: durante la terapia, el paciente entra en un estado profundo de relajación y, dependiendo de su sensibilidad, puede notar el movimiento de los líquidos.

El padre de la Osteopatía Biodinámica es el doctor americano Andrew Taylor Still (1828-1917) que funda escuela en 1892. La Biodinámica llega a Europa en el año 1917 de la mano del Dr. John Martin Littlejohn (1865-1947) que fundó la British School of Osteopathy. De origen escocés, se trasladó a Kirksville (Misuri) donde aprendió del Dr. Still y, posteriormente, regresó a Europa.