Conocer en cada momento con exactitud el tipo de piel es fundamental para elegir el correcto tratamiento. Las diferentes tipologías de la piel hacen que sea imprescindible analizar los tejidos dérmicos para descubrir sus necesidades individuales y elegir así el tratamiento más adecuado.
Gracias a la tecnología más innovadora, el Analizador Facial consigue un diagnóstico muy preciso del estado dérmico del cliente:
- Conoce el nivel exacto de hidratación: un sensor de humedad al lado de la lente clasifica el contenido de agua de la piel en una escala de 0 a 100.
- Evalúa la salud de la piel: por medio de la videocámara Visioscope, se puede analizar la estructura de la piel con espectaculares imágenes en primer plano. También permite saber el nivel de queratina, de sebo, de melanina o de colágeno presentes en la dermis.
- Analiza el estado de las arrugas: con las más avanzada tecnología se puede visualizar en 3D la profundidad de las arrugas, para su posterior impresión y presentación. También se puede medir la porosidad de la piel.
- Mejor servicio al cliente: además de poder ofrecer un tratamiento mucho más personalizado, el analizador permite con su sofisticado software mostrar a los clientes el estado de su piel antes y después del tratamiento, demostrando su efectividad y ayudando a recomendar los mejores cosméticos para el cuidado posterior.